El personal sanitario critica la escasez de raciones, la falta de adaptación a los turnos y el incumplimiento de intolerancias alimentarias
Los médicos del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria han denunciado públicamente la calidad del servicio de catering que se presta en el centro. Entre las principales quejas destacan que las raciones son escasas, que la comida no se adapta a los turnos de trabajo y que no se respetan las intolerancias alimentarias.

Varios facultativos han expresado esta situación en redes sociales, asegurando que “no piden una exquisitez, sino una comida saludable” que les permita afrontar sus jornadas laborales con garantías.
Por su parte, desde la gerencia del hospital confirman que las quejas han sido trasladadas a la empresa responsable del servicio. Además, señalan que ya se han planteado medidas correctoras, como la instalación de carros calientes, con el fin de que los médicos puedan recoger los platos en un horario más flexible y se facilite así la organización en los turnos.