Ucrania ha negado por completo acusaciones similares en el pasado. Autoridades ucranianas han denunciado por contra a Rusia por perpetrar una campaña de bombardeos indiscriminados sobre Mariúpol
El comité de investigación del Gobierno de Rusia sobre la invasión de Ucrania ha acusado este sábado al Ejército ucraniano y las fuerzas aliadas de la organización paramilitar Batallón Azov. Han denunciado que Ucrania emplea a los ciudadanos de la localidad de Mariúpol como escudos humanos para protegerse de los bombardeos rusos sobre la ciudad, ahora bajo control de Moscú.
«Los militares ucranianos y los nacionalistas de Azov, proclamados defensores de Mariúpol, han usado a los civiles para ocultarse, como escudos humanos. Han ocupado deliberadamente posiciones en edificios residenciales, jardines de infancia y escuelas», según un miembro del comité de investigación a la agencia TASS.
Desde estas posiciones «colocaron armas pesadas y abrieron fuego con ellas para acusar luego a Rusia y a las fuerzas de la (autoproclamada) República Popular de Donetsk«, aliadas de Moscú, de instigar los bombardeos.
El comité ha alcanzado estas conclusiones, dice el investigador, tras recabar información de miles de civiles de Mariúpol. Han explicado que muchos civiles han asegurado que los paramilitares del Batallón Azov les habían prohibido salir de los sótanos tras amenazarles con matarlos o con minar las salidas.
Disparos contra civiles
El comité de investigación acusa igualmente a los paramilitares de Azov de disparar contra civiles identificados como tales. Personas, han dicho, que intentaban escapar de la ciudad a través de los puestos de control de los guerrilleros.
«Todos esos hechos quedan registrados y sirven además de base para iniciar procesos penales contra los autores y las personas que les dieron las órdenes», ha añadido el investigador, bajo condición de anonimato.
Ucrania niega las acusaciones
Ucrania ha negado por completo acusaciones similares en el pasado. Autoridades ucranianas han denunciado por contra a Rusia por perpetrar una campaña de bombardeos indiscriminados sobre la ciudad. Una situación que, durante muchos días, impidieron el paso de convoyes humanitarios o la apertura de corredores de evacuación.
Las autoridades ucranianas estiman que miles de personas, incluidos niños, han muerto por estos bombardeos en Mariúpol. Mientras que más de un millar de militares ucranianos han sido capturados en la ciudad y transferidos a Rusia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que la situación sanitaria en Mariúpol es especialmente alarmante. Entre los motivos la ausencia de agua potable y material sanitario, especialmente en el sur de la localidad.