Durante la declaración en el Senado sobre el caso mascarillas, la exconsejera de Sanidad canaria afirmó considerar su cese como «injusto»
La exconsejera de Sanidad canaria, Teresa Cruz Oval, ha comparecido esta tarde en la Comisión de Investigación sobre el caso mascarillas en el Senado.
Cruz fue cesada por el presidente regional, Ángel Víctor Torres, al principio de la pandemia. Durante su intervención ha defendido en el Senado la limpieza de los contratos de material sanitario durante su breve mandato. También afirmó que quien tras su salida fue nombrado director del Servicio Canario de Salud (SCS), Conrado Domínguez, imputado en el caso mascarillas, no era «un buen gestor» ni un experto sanitario, pero sí «un conseguidor».
Cruz Oval solo estuvo en el cargo ocho meses y tras su salida se celebraron los contratos investigados por la justicia. Reconoció en la comisión de investigación del caso Koldo que considera que su destitución fue «injusta«. A su criterio, desarrolló una gestión exitosa de los primeros casos de pandemia e instauró un sistema de contratación que impedía ninguna irregularidad.
Cese en 2020 y una razón «no oficial»
El entonces presidente canario, Ángel Víctor Torres, justificó oficialmente el cese de la consejera el 25 de marzo de 2020 en el «interés general» y porque eran necesarias otras estrategias contra el covid.
Sin embargo, Cruz Oval reconoció en su declaración que hubo otra explicación «no oficial». Esta no fue revelada porque queda «en el ámbito privado» entre ella y el expresidente.
Admitió que su condición de mujer tuvo que ver con su cese, pero no por parte de Torres, sino de algunos miembros del pacto de gobierno de Canarias. Dicho pacto estuvo formado por PSOE, Nueva Canarias, Agrupación Socialista Gomera y Sí Podemos. Ese miembro del pacto, al que no identificó, entendía que cualquier hombre hacía las cosas mejor que una mujer, «no solo en el área de sanidad sino en cualquier área», explicó.
La senadora del PP, Rocío Divar, interrogó a la exconsejera en nombre de su grupo parlamentario. Divar consideró muy relevante el testimonio de Cruz Oval, cuya gestión, trayectoria y honradez elogió. El PSOE tiene miedo a que hable, Torres la castigó y a Conrado Domínguez lo premió con la dirección del SCS, dijo la senadora.
En cuanto Cruz Oval «salió por la puerta» se celebraron los contratos investigados por la justicia en el caso mascarillas. En caso Tito Bernie y en el caso Koldo. «Usted no quiso pasar por el aro y se convirtió en un estorbo», resumió la senadora del PP.
Defensa de la sanidad pública
Teresa Cruz fue cesada seis días después de que se creara el comité de gestión de emergencias sanitarias. Un órgano en teoría asesor, presidido por Torres, quien en contra del criterio de la consejera puso como coordinador del mismo a Conrado Domínguez.
Domínguez había sido director del SCS con Coalición Canaria en la legislatura anterior y recuperaría el cargo meses después del cese de la consejera. Finalmente, fue destituido ya una vez estuvo imputado por Anticorrupción.
La exconsejera explicó que había asumido el cargo en julio de 2019, y su hoja de ruta era «la defensa a ultranza de la sanidad pública«.
Eso generó «mucho ruido» por parte de la sanidad privada, los políticos que la representan y dos sindicatos. Pese a que recibió sugerencias al respecto, rechazó mantener a Domínguez al frente del SCS porque ya conocía su gestión con Coalición Canaria. No era un buen gestor ni un experto sanitario, era «un conseguidor», sostuvo.
Sistema de contratación
La exconsejera explicó el sistema de contratación que instauró con motivo de la pandemia para evitar cualquier irregularidad.
Negó haber tenido información, conocimiento, o contacto alguno con las empresas que posteriormente contrataron con el SCS la venta de material objeto de la investigación judicial.
Sí reconoció que Antonio Olivera, el entonces viceconsejero de Presidencia y luego, tras su destitución, director interino durante unos meses el SCS, sí le dirigió consultas y preguntas sobre la contratación de algunas empresas. No obstante, ella le remitió al protocolo establecido por su departamento.
Teresa Cruz Oval eludió todas las preguntas en las que, tanto la senadora del PP Rocío Divar como el de CC Pedro San Ginés como la de UPN Mar Caballero, sugerían que su destitución fue por ser una molestia para los contratos.
En su opinión, Torres prescindió de ella porque entendió que la estrategia de la Consejería de Sanidad una vez declarada la pandemia debía de ser diferente. Afirmó que en ninguna de las tres compras de material realizadas durante su mandato relacionadas con el covid hubo ninguna irregularidad. Además, expresó que en ningún caso Torres mostró interés en esos contratos.
Agradecida a Torres
También dejó claro su agradecimiento a Torres por haberla puesto al frente de la sanidad pública durante ocho meses. «Creo que el cese fue injusto, pero soy una persona leal a mi partido y al presidente. Si el presidente considera que me tiene que cesar me voy sin ningún problema y sin hacer ruido», explicó.
«Yo llego a la política a servir, no a servirme; si sirves un mes o si sirves ocho meses estupendo; doy las gracias al presidente por la oportunidad de asumir la Consejería», aunque «te duele cuando te dejas las pestañas en una situación durísima», por lo cual «me tomé un tiempo para pasar página», relató.