Venció a la UD Las Palmas en el Estadio de Gran Canaria y jugará la final de ascenso a La Liga Santander tras dos tantos de Enric Gallego
El CD Tenerife venció por 1-2 a la UD Las Palmas en el estadio de Gran Canaria y jugará la final de ascenso a La Liga Santander, a partir de la próxima semana, frente al ganador de la eliminatoria entre SD Eibar y Girona FC.
El equipo blanquiazul, que partía con una ventaja del 1-0 del partido de ida, volvió a ser mejor que su eterno rival y marcó dos goles en la primera mitad, por mediación del delantero catalán Enric Gallego, el primero muy pronto, en el minuto 4, y el segundo de penalti, en el tiempo de prolongación del primer periodo.
Lesión de Jonathan Viera antes del descanso
El equipo amarillo, que además perdió por lesión a Jonathan Viera antes del descanso, acortó la diferencia en el segundo tiempo con un tanto de Eric Curbelo, a la salida de un córner, aunque ya no tuvo fuerzas para intentar dos goles más y forzar la prórroga.
Se esperaba una salida en tromba del equipo amarillo, pero fue su rival el que entró mucho mejor al partido. En una de sus aproximaciones, un centro de Corredera desde la derecha lo cabeceó Enric Gallego adelantándose a un dubitativo Álvaro Valles, y el balón acabó entrando en la portería, después de que Raúl Navas intentase sacarlo. El VAR concedió el tanto, pues el balón había traspasado claramente la línea de meta.
Tardó en reponerse del golpe el conjunto grancanario, pero a la media hora de partido ya era claro dominador del juego, sometiendo a un Tenerife que fue perdiendo salida de balón. Un tiro de Moleiro y un cabezazo de Rober, ambos detenidos por Juan Soriano, fueron los primeros intentos locales.
Las Palmas, sin embargo, aún recibiría dos golpes más antes del descanso. Jonathan Viera tuvo que dejar el campo entre lágrimas, con una lesión en el muslo derecho que arrastraba desde los minutos iniciales, por lo que pidió el cambio.
Aún con el Gran Canaria tratando de reponerse del segundo varapalo de la tarde, en el tiempo de prolongación, un codazo de Raúl Navas a Mollejo en una pugna aérea fue castigado como penalti por el árbitro, tras ser llamado por el VAR. Álvaro Valles estuvo muy cerca de detener el disparo de Gallego, que acabó en la red.
Segunda parte
Tras el descanso en el Estadio de Gran Canaria, la Unión Deportiva necesitaba recurrir a la épica de lograr tres goles para forzar la prórroga, y además sin Viera, su jugador franquicia.
A pesar de ello, llegó al área rival con cierta facilidad, tuvo sus momentos con la habilidad de Moleiro, aunque encontró el premio a balón parado, tras un saque de esquina de Benito desde la izquierda que Eric Curbelo cabeceó a la red, ganando la pugna a Mellot, con 20 minutos por delante.
El Tenerife no lograba enlazar tres pases para exigir a un rival muy expuesto atrás y acabó defendiendo su ventaja con tres centrales, con un claro 1-5-4-1.
Los de Pimienta reclamaron penalti en un despeje de Juan Soriano que acabó impactando con los tacos en Mujica, que el árbitro no concedió, y acabaron muy justos de fuerzas, colgando balones frontales que el Tenerife resolvió sin problemas, para asegurar la victoria y el pase a la gran final por el ascenso.