Se trata de la mayor intervención desarrollada en Canarias de falsificación de ropa y calzado

La Guardia Civil desarticula la primera fábrica de serigrafiado textil donde elaboraban prendas falsificadas para su comercialización en Lanzarote.
Así, las autoridades detuvieron a cuatro personas de entre 26 y 53 años y se ha investigado a una quinta por la presunta comisión de delitos contra la propiedad intelectual, y/o formar parte de un grupo criminal y otro delito contra los derechos de los trabajadores.
Se trata de la mayor intervención desarrollada en Canarias de este tipo de productos en la que no solo se ha incautado el material falsificado, sino las máquinas de producción para realizar esas falsificaciones, que se pretendían distribuir en el Archipiélago canario.
Logos y diseños de marcas reconocidas
La investigación se inició en julio de 2025, a raíz de la inspección de varios contenedores de ropa que llegaban a la isla de Lanzarote. Aquella primera revisión condujo a los agentes hasta una nave industrial que, en un primer momento, levantó sospechas y que más tarde resultó ser el epicentro de una compleja red de falsificación.
En el interior de dicha nave, situada en el municipio de Arrecife, se descubrió una fábrica de confección industrial dedicada a la producción de prendas falsas que reproducían logotipos y diseños de reconocidas firmas comerciales. Según fuentes de la investigación, los implicados llevaban al menos 7 años desarrollando esta actividad ilícita, operando a gran escala y con un sistema organizado de distribución destinado a introducir la mercancía falsificada en el mercado.
El grupo criminal importaba grandes cantidades de prendas sin nombres procedentes de diversas empresas de comercio al por mayor situadas en el polígono de Cobo calleja de Fuenlabrada así como de otras de Parla o Alcobendas (Madrid). Dichas prendas llegaban en contenedores vía marítima hasta el puerto de Los Mármoles en Arrecife. Una vez en Lanzarote, el grupo Criminal depositaba el género en la nave industrial registrada donde también confeccionaban las prendas falsificadas.
Alrededor de ocho millones en el mercado
En el transcurso de la operación, los agentes accedieron al interior de la nave industrial donde localizaron un completo entramado destinado a la falsificación de prendas y calzado. En el registro se intervinieron diez planchas de impresión directa por tinta, una plancha térmica y dos máquinas especializadas en el serigrafiado de zapatillas, todas ellas conectadas a ordenadores para el diseño y posterior reproducción electrónica de los logotipos de reconocidas marcas comerciales.
El hallazgo no se limitó a la maquinaria industrial. Los investigadores también incautaron una ingente cantidad de logotipos, transfer y etiquetas, listos para ser aplicados sobre productos textiles y deportivos. Entre las marcas afectadas se encontraban algunas de las más relevantes del mercado internacional: Adidas, Nike, Puma, Lacoste, Calvin Klein, Hugo Boss, Michael Kors, Christian Dior, Armani, Balenciaga, Gucci, Versace, Fila y Tommy Hilfiger, entre otras.
Asimismo, durante el operativo se incautaron cerca de mil cajas que contenían prendas preparadas para ser falsificadas. Según el informe elaborado por los peritos judiciales presentes en la investigación, el valor que habrían alcanzado estos artículos en el mercado, una vez puestos a la venta al público, se estimaba en unos ocho millones de euros.
Además, la Guardia Civil realizó 3 registros en domicilios y 1 en una tienda donde se incautaron prendas falsificadas, dinero en efectivo y material informático. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.

Repercusiones de las falsificaciones
Las falsificaciones de prendas provocan un daño reputacional a las marcas, ya que la baja calidad de los productos falsificados deteriora la confianza del consumidor, generando graves repercusiones económicas, como la pérdida de empleos y ventas millonarias para las empresas, y daños para la salud del consumidor, debido al uso de tintes y tejidos tóxicos.
Finalmente, las falsificaciones también implican un riesgo legal para los infractores, con penas de prisión y multas, y un impacto negativo en la imagen turística y la competitividad del país.
En la investigación ha participado la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Las Palmas mediante la personación de Inspector de trabajo para poder determinar la existencia de posibles fraudes a la Seguridad Social e infracciones en materia de trabajo por parte de los integrantes del grupo criminal investigado.