Los siete patrones detenidos, con edades comprendidas entre los 18 y 38 años, alcanzaron las costas canarias en tres pateras entre los meses de agosto y octubre
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Las Palmas de Gran Canaria a siete hombres, con edades comprendidas entre 18 y 38 años, como presuntos autores de los delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal y homicidio imprudente de tres pateras en las que viajaron hasta Gran Canaria junto a otros 127 migrantes, de los que murieron ocho personas, entre ellos, un menor y una mujer que fallecieron en la isla debido a las «pésimas condiciones» de la travesía.
Las embarcaciones de las que se les considera patrones alcanzaron las costas grancanarias entre agosto y octubre. En concreto, la primera arribó al puerto de Arguineguín, en Mogán (Gran Canaria), remolcada por Salvamento Marítimo, el 27 de agosto con 31 migrantes subsaharianos, según ha informado la Policía Nacional en nota de prensa.
En el interior de esta patera se encontraron, además, cuatro cuerpos sin vida (un hombre y tres mujeres, una de ellas menor de edad). Asimismo, pocas horas después de alcanzar tierra, otra de las mujeres fallecía por las «pésimas condiciones» del viaje que, según expusieron los propios migrantes, duró unos 15 días desde su partida.
Posteriormente, en el mes de octubre, otras dos pateras fueron socorridas al sur de Gran Canaria y trasladadas hasta Arguineguín. En este caso con 52 y 43 migrantes a bordo, falleciendo una y dos personas, respectivamente, además de un bebé, que llegó en parada cardiorrespiratoria.
En este caso, y según las manifestaciones de varios de los ocupantes, un segundo cuerpo fue arrojado al mar durante la travesía, que duró en este caso siete días desde su salida desde Marruecos.
Presuntos menores
Por otro lado, tres de los investigados aseguraron a su llegada que eran menores de edad con el objetivo de evadir la acción de la justicia. Las pruebas médicas determinaron, sin embargo, la mayoría de edad de todos ellos.
Finalmente, agentes de las Unidades contra las Redes de Inmigración Ilegal y Fronteras de Las Palmas identificaron a siete de los migrantes como los responsables de patronear las embarcaciones en las que murieron un total de ocho personas.
Por ello, los agentes le detuvieron como presuntos autores de los delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal y homicidio imprudente y puestos a disposición de la Autoridad judicial competente, quien decretó el ingreso en prisión de todos ellos.