Sobre la capital de Austria se ha activado un dispositivo de seguridad. Los servicios de Inteligencia han detectado indicios de un posible ataque islamista
Las fuerzas de seguridad austriacas han activado un amplio dispositivo de vigilancia en la capital, Viena, después de que los servicios de Inteligencia hayan detectado indicios que apuntan a un posible atentado de motivación islamista, con las iglesias como potencial objetivo.
Vigilancia aumentada
La Policía de Viena, que ha confirmado una «vigilancia aumentada» en los puntos neurálgicos de la ciudad, ha reconocido en sus redes sociales que «hay una amenaza no específica sobre un asalto a iglesias», sin entrar en más detalles al respecto.
«Si hay un peligro inminente en algún lugar, emitiremos un aviso inmediatamente«, ha explicado la institución. Por ahora, la Policía ha apuntado que «no se puede prever la duración de estas medidas», que han supuesto un mayor despliegue de agentes en la principal ciudad de Austria.