El músico recibirá la condecoración el próximo día 3 de diciembre en el transcurso de la gala de entrega de la séptima edición de los Premios Canarios de la Música que se celebra en el Teatro Leal de La Laguna
En la mañana de este lunes 10 de noviembre, durante la emisión en directo del programa de la Radio Canaria, ‘La Alpispa‘, se ha anunciado el Premio de Honor de la Asociación Premios Canarios de la Música a Domingo Rodríguez “El Colorao” (1964). El timplista majorero ha recibido esta distinción que concede anualmente la asociación para reconocer la sólida trayectoria y contribución a la música y a la cultura de Canarias de un artista.
El músico, que recibirá la citada condecoración el próximo día 3 de diciembre en el transcurso de la gala de entrega de la séptima edición de los Premios Canarios de la Música que se celebrará en el Teatro Leal de La Laguna, se congratula de que “sean los propios compañeros músicos quienes me concedan este premio. Estoy inmensamente agradecido. Es todo un halago que además indica que algo bueno vengo haciendo desde hace años. Uno trabaja con amor y cariño para intentar ser feliz y entregar al público su trabajo de manera honesta. Siempre me he sentido reconocido por el público de Canarias”, señala el timplista.
Domingo Rodríguez «El Colorao» junto a Lisandro Rodríguez, presidente de la Asociación de los Premios Canarios de la Música.
Tomás Galván, locutor de la Radio Canaria y quien será uno de los presentadores de la gala de los premios, «El Colorao» y Lisandro Rodríguez.
Los citados premios, de los que hace unos días también ‘La Alpispa’ dio a conocer los nombres de los 43 nominados de las distintas categorías, están organizados por la Asociación Premios Canarios de la Música y la Radio Canaria, con la colaboración del Gobierno de Canarias, el Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna y el Teatro Leal, contando con el patrocinio de Munchitos, Mahou, Ballantine’s y St Petroni.
Con este galardón, Domingo Rodríguez se une a una lista de grandes artistas reconocidos en el contexto de estos premios por su influencia y aportaciones a la identidad cultural canaria como Braulio, María Mérida, Taburiente, Elfidio Alonso, Teddy Bautista o Mary Sánchez.
El timple como reflejo del paisaje y el alma canaria
Hay músicos que tocan un instrumento y otros que lo transforman en la voz de un pueblo. Domingo Luis Rodríguez, conocido artísticamente como “El Colorao”, ha hecho del timple mucho más que un símbolo canario: lo ha proyectado al mundo como un instrumento capaz de emocionar, dialogar y reinventarse sin perder su esencia.
“Soy un músico de raíz –señala él mismo-, y contemplo que la música canaria va mucho más allá que sólo un par de acordes. En mi caso, además, puede decir que en mis creaciones siempre está implícito el paisaje de Tetir, su lugar de nacimiento, mi isla, mi familia. Haga la música que haga siempre va a sonar ese paisaje que llevo impreso en el alma”, explica.
Nacido en Fuerteventura, en el seno de una familia profundamente ligada al folclore, su destino musical comenzó temprano bajo la guía de Casimiro Camacho. Aquellos primeros rasgueos en la agrupación de su pueblo marcaron el inicio de una trayectoria que, años después, situaría su nombre entre los grandes referentes del timple.
Su formación lo llevó lejos de las islas para seguir perfeccionando su lenguaje musical. París fue su primera gran parada, donde se formó como guitarrista junto al maestro Blas Sánchez y tomó clases con figuras internacionales como Roland Dyens, Abel Carlevaro o José Tomás. Más tarde, en Madrid, trabajó con el argentino Jorge Cardoso, reforzando el puente artístico que siempre mantuvo entre Canarias y América Latina.
De la tierra al mundo sin soltar la raíz
De regreso a su tierra, el timple —ese instrumento que siempre lo acompañó— se convirtió definitivamente en su centro creativo. Su primer disco, ‘El Timple’, supuso un antes y un después: a partir de ahí comenzó una carrera imparable que lo llevó a escenarios nacionales e internacionales, consolidándolo como una referencia indispensable para todo aquel que se acerque al instrumento más representativo de la identidad canaria.
Con una manera de tocar que abraza la tradición, la depura desde el conocimiento académico y la renueva con un sello propio, Domingo ha contribuido a expandir los límites del timple. Su labor como intérprete, docente y divulgador lo ha llevado a impartir cursos dentro y fuera del archipiélago, colaborar con artistas de primer nivel y firmar proyectos que hoy forman parte del patrimonio musical de Canarias.
Entre sus hitos destacan el trabajo etnomusical ‘Aulaga’, considerado una de las obras más valiosas de la música tradicional canaria; la creación del primer método de timple en escritura solfeística; así como reconocimientos como la Medalla de Oro del Gobierno de Canarias, la Añepa, el Cachorro de Honor o el Galardón del Plátano de Canarias. En 2016 fue nominado a los Latin Grammy por su colaboración con el conjunto puertorriqueño Mapeyé. Un año después, la Fundación Kraus-Galdós lo nombró “músico en residencia”, presentando proyectos tan relevantes como A Solas, ReCuerdas y Suite Canaria para timple y orquesta.
Su afán por tender puentes culturales dio lugar a ‘Encrucijada’, un espectáculo que entrelaza sonoridades de África, Europa y América desde la raíz canaria. Su último disco, ‘De vida y vuelta’, grabado en Lisboa junto al virtuoso brasileño Yamandú Costa, confirma su firme vocación de diálogo musical.
Hoy, “El Colorao” continúa construyendo camino. Prepara un nuevo trabajo discográfico junto al guitarrista palmero Juan Carlos Pérez Brito, un proyecto que promete seguir trazando ese viaje sonoro que va de la tierra al mundo sin soltar la raíz.


