Con este anuncio se abre la puerta a una negociación que ponga fin a la violencia que vive el país latinoamericano
El Gobierno de Colombia ha anunciado que está dispuesto a aceptar una «mesa de negociación» para abordar la crisis en el país, tras un primer encuentro con el Comité Nacional del Paro que ha concluido sin acuerdo y en el que se han constatado diferencias en la terminología para abordar los contactos.
Este era el término que desde el comité defendían y que había reprochado al Gobierno no emplear, lo que para ellos demostraba que no había garantías para iniciar el diálogo en vista a poner fin a las manifestaciones que desde hace trece días llenan las calles colombianas.
Horas después, poco antes de la medianoche del lunes, el alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, ha anunciado que «el Gobierno Nacional, a partir de este momento, está en la plena disposición de adelantar una mesa de negociación con el Comité Nacional del Paro, para avanzar en los temas de la agenda que acordaremos con el acompañamiento de la Iglesia Católica y de Naciones Unidas».
Negociación para el fin de la violencia
Así lo ha confirmado el mismo a través de un vídeo, tras explicar que la Administración ha analizado las propuestas puestas sobre la mesa de esa primera «reunión exploratoria». Con este anuncio, por tanto, se abre la puerta a una negociación que ponga fin a la violencia que vive el país latinoamericano.
Ceballos también ha añadido que «debemos garantizar la seguridad y el orden a todos los ciudadanos de Colombia, pero siempre en el marco del respeto de los Derechos Humanos», para detallar que «habrá cero tolerancia a cualquier violación de la Constitución y de la ley por exceder las funciones de los funcionarios públicos y, entre ellos, de la Fuerza Pública».
En este sentido, Ceballos ha señalado que la Policía y el Ejército «hacen todo el mayor esfuerzo para protegernos a nosotros y a nuestras familias por lo que también merecen respeto y su vida también debe ser protegida».
Las protestas que sacuden Colombia desde hace ya doce días y que se han cobrado al menos 27 muertes según el Gobierno –más de 40 según organizaciones civiles– comenzaron como una movilización contra la reforma fiscal planteada por el Gobierno del presidente Iván Duque, pero una vez retirada la misma, se mantienen siete reivindicaciones que estarán sobre la mesa en las negociaciones entre el Ejecutivo y el Comité Nacional del Paro.