El conjunto canarista venció al Bakken Bears en la primera jornada de una nueva edición de la Liga de Campeones en el Santiago Martín, donde pudieron acudir unos 200 aficionados
Cerca de 200 aficionados presenciaron este martes en directo el debut y el triunfo del Iberostar Tenerife sobre el Bakken Bears (98-73) en la primera jornada de la Liga de Campeones FIBA, que se disputó en el pabellón de Deportes Santiago Martín después de que el Gobierno de Canarias diese el visto bueno al protocolo presentado por el club y las medidas pertinentes para evitar la propagación del Covid-19.
Fue, sin duda, la nota más destacada de un partido en el que, si bien el equipo danés plantó cara en el primer cuarto y llegó a irse por delante en el marcador al finalizar los diez primeros minutos (23-25), a partir del segundo periodo fueron los aurinegros los grandes protagonistas.
Otra de las notas destacadas fue el debut de Spencer Butterfield en las filas del Iberostar Tenerife, que en los cerca de nueve minutos que jugó antes del descanso se mostró infalible desde el perímetro, anotando los tres triples que intentó.
El pívot georgiano Gio Shermadini fue el máximo anotador del partido y uno de los grandes protagonistas, tanto por su anotación como por el dominio del juego interior.
Empezó muy acertado el Bakken Bears ante la falta de intensidad defensiva del Iberostar Tenerife. Evans, Peterson y sobre todo Diouf (anotó tres triples seguidos en el primer cuarto) aprovecharon muy bien las facilidades que les daba la defensa del equipo tinerfeño, llegando incluso a estar siete puntos arriba (15-22) con ocho minutos disputados.
Tiempo muerto de Vidorreta y el Iberostar Tenerife empezó a reducir diferencias desde su defensa y que fue a mejor en el segundo cuarto cuando ya empezó a dominar el choque.
Shermadini se mostró firme en este primer cuarto, mientras los exteriores empezaban a hacer daño, sobre todo Butterfield que no se escondió en su debut y anotó todo lo que tiró.
En el segundo cuarto el Iberostar Tenerife salió con otra actitud defensiva y eso le llevó, no solo a que su rival ya tuviera más problemas para anotar, sino que pudo correr y mandar tanto en el juego como en el marcador.
Un parcial de 14-2 hizo que las ventajas locales empezaran a ser importantes (37-29), y se pudieran mantener hasta el descanso (48-35).
El Iberostar Tenerife salió en el tercer cuarto dispuesto a sentenciar el choque y lo hizo con contundencia. Dominio del rebote, del juego interior y acierto desde fuera, lo que les llevó a estar pronto con 20 puntos a favor (55-35, min.23).
Las diferencias fueron a más hasta llegar a los 24 puntos (65-41) en un choque que ya parecía tener un claro vencedor, no solo por lo acertado del conjunto de Vidorreta, sino porque el rival parecía haber bajado ya los brazos.
En los últimos diez minutos, el equipo aurinegro siguió mandando con claridad y sin excesiva intensidad. Su dominio en la zona le daba seguridad, más aún cuando los exteriores no fallaban.
Txus Vidorreta aprovechó los últimos instantes del choque para poner a cuatro canarios en cancha –López, Sergio Rodríguez, Fran Guerra y Alberto Cabrera-, una situación que hacía muchos años que no se daba en el equipo aurinegro.