El tráfico en la circunvalación de Las Palmas de Gran Canaria se cortó en el tramo del viaducto del Guiniguada, para trasladar el puntal de acero de 25 toneladas
El Cabildo de Gran Canaria puso en marcha en la madrugada de este sábado la maniobra de traslado del puntal de acero de 25 toneladas que servirá para reforzar la estructura del Viaducto del Guiniguada hasta el fondo del barranco.
Esta fase de las obras de emergencia para reforzar la estructura del Viaducto es de gran complejidad. Esto ha obligado al área de Carreteras a cerrar, al completo, las dos calzadas, el tramo de la Circunvalación de Las Palmas de Gran Canaria (GC-3) que cruza sobre el Guiniguada desde la noche de este viernes y hasta la media tarde del sábado.
La singularidad de esta maniobra han llevado al Cabildo a coordinar con el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y otras autoridades competentes, un dispositivo especial para desviar a los conductores que circulen por este tramo de la Circunvalación entre la noche del viernes y la media tarde del sábado.
Los primeros cortes se realizaron en la calzada en sentido sur-norte en el enlace situado junto a Barranco Seco. En este punto, los coches que se dirigían a Ciudad Alta, Tamaraceite o el norte de la Isla tuvieron que desviarse por la GC-31 hasta los túneles de San José. Desde ahí, a través de la avenida Marítima, pudieron volver a enganchar con la Circunvalación a través de los túneles de Julio Luengo.
Ha sido necesaria la colaboración a los conductores
El segundo corte, el de la calzada dirección norte-sur, se realiza a la altura del entrelazado de la GC-3 con la GC-23, junto a La Paterna. Este corte, y en especial atención a la celebración de las fiestas de San Lorenzo y a un espectáculo musical en Arucas, se ejecutó ya avanzada la madrugada para evitar la menor afección posible a los conductores. Los conductores que circularon en dirección sur por la GC-3, al llegar a la altura del Guiniguada debieron desviarse por la GC-23 hasta La Ballena. Y desde allí a los túneles de Julio Luengo, donde se pudieron incorporar ya a la GC-1 y seguir hacia el sur de la isla.
Solo se mantuvo abierto, mientras dure esta maniobra, el acceso desde la GC-31 a la Circunvalación para llegar por la GC-3 hasta el enlace de Lomo Blanco-Universidad, y facilitar la conectividad de los residentes en Lomo Blanco, Lomo Verdejo o El Zurbarán.
Estos cortes se mantuvieron hasta la media tarde del sábado, por lo que se solicita la máxima colaboración de los conductores que se vean afectados para que sigan en todo momento los desvíos y las indicaciones de los operarios del Cabildo. El Área de Carreteras también comenzará a anunciar este viernes a los conductores de esta incidencia a través de los paneles informativos situados en los pórticos de la GC-1, GC-2 y GC-3.
El puntal de acero tiene el tamaño de una casa de tres plantas
La operación de traslado del puntal de acero, del tamaño de una casa de tres plantas, comenzó la noche del viernes. Fue con la instalación sobre la calzada del puente de dos grúas especiales y capaces de levantar una estructura de 25 toneladas de peso.
El camión-plancha ha empleado cerca de una hora en atravesar los 450 metros que separan la campa de trabajo de la entrada a los túneles de Pico Viento. Ahí, aprovechando una explanada para emergencias, el camión con la pieza ha hecho un giro de 180 grados y ha recorrido otros 800 metros hasta situarse a mitad del puente más cercano al mar.
Sobre las 11:00 horas, se procedió al izado de la pieza desde la plancha para situarla en el hueco existente entre los dos puentes. Para así deslizarla entre ambas estructuras y bajarla sin problema hasta el fondo del barranco, donde un equipo de operarios esperaba en la zona de trabajo habilitada bajo el viaducto.
Con el puntal ya asegurado en la zona de trabajo del lecho del barranco, los operarios del Cabildo procedieron a retirar las dos grúas de la calzada del viaducto. Abrieron, entonces, este tramo de la Circunvalación al tráfico, devolviendo la normalidad a todo el sistema de carreteras del área metropolitana.
Los trabajos continuarán en septiembre
Una vez el puntal extradosado ha sido bajado a la zona de obras habilitadas en el fondo del barranco, se inicia una nueva fase de trabajos para montar los andamios y los cables necesarios para izarla hasta su destino final bajo el puente que soporta la calzada sur-norte del viaducto. Esta maniobra se prevé realizar en septiembre. No conllevará el corte de ambas calzadas de la GC-3 como sí ocurrió este sábado.
Las obras terminarán en 2025
Con la instalación de este refuerzo de acero que se colocará a modo de puntal bajo el puente más afectado por la rotura de los cables de acero que dan estabilidad al viaducto. Se encara la recta final de las obras de emergencia para dotar de la máxima seguridad a todo el Viaducto del Guiniguada. Esto se espera ratificar a mediados de 2025 cuando acaben todos los trabajos de instalación de tendones sobre la pieza extradosada.
El Cabildo ha estado trabajando en la sustitución de los 32 tendones de acero originales por otros nuevos. A estos se han añadido otros 20 tendones nuevos para incrementar la seguridad de la estructura que soporta una media de 110.000 vehículos cada día. Cada tendón está formado por un gran cable que aglutina en su interior a entre 25 y 27 cordones de acero en tensión. Estas dos estructuras que conforman el Viaducto del Guiniguada cuentan ya con más de 140 kilómetros de nuevos cables de acero en su interior.
Una vez acabados los trabajos, la pieza extradosada ejercerá una fuerza ascensional permanente de 574 toneladas sobre el tablero. Toda esta obra de ingeniería devolverá a todo el viaducto la fiabilidad y durabilidad de una obra recién construida. Según el Cabildo, se garantiza que ambos puentes podrán tener una vida útil de cien años más en uso y en perfectas condiciones de seguridad.