Narra la historia de cuatro jóvenes migrantes llegados a Canarias que encontraron en el deporte una vía de integración
Estreno este jueves a las 23:30 horas en Televisión Canaria
Este jueves 27 de marzo, a las 23:30 horas, Televisión Canaria estrena ‘La gran travesía’, un documental de Guillermo Uruñuela sobre la integración social de personas migrantes a través del deporte.
Grabado en diferentes islas del Archipiélago, el documental cuenta la historia de cuatro jóvenes migrantes que llegaron a Canarias tras una peligrosa travesía a través del océano y cómo, una vez aquí, encontraron en el deporte un camino hacia la inclusión.
Los marfileños Cheik Koné y Bamoury Coulibaly, y Ansou Dibassy y Samoura Cheickne, de Mali, narran en primera persona sus experiencias. Cómo fue el viaje en patera desde las costas africanas hasta Canarias, por qué tomaron la decisión de migrar y cómo, gracias a la práctica deportiva, llegaron a hacer amigos e integrarse en su nuevo destino.
Con diferentes historias de vida, proyectos y situaciones personales, los cuatro cuentan cómo el deporte les conectó con un grupo, les aportó amistades, aprendizaje y una forma de acercarse a una sociedad que era desconocida para ellos.
El deporte como herramienta de integración
El documental muestra la historia de Cheik Koné, un joven marfileño que a los 19 años se subió en una patera en busca de oportunidades junto a su hermano de ocho años. Hoy en día, el Club Deportivo Herbania de Puerto del Rosario, Fuerteventura, se ha convertido en parte fundamental de su vida.
El maliense Ansou Dibassy tuvo que dejar la escuela con 10 años para ayudar a su familia en el cuidado del ganado y los cultivos. A los 21 años decidió marcharse de su pueblo para buscar otro futuro. Un camino que le llevó a embarcar, junto a otros tantos, en una patera en la que pasaron más de una semana a la deriva en alta mar, hasta que fueron rescatados. Hoy ha conseguido un trabajo y practica boxeo en un club de Gran Canaria.
Bamoury dejó su pueblo a las afueras de Costa de Marfil en busca de oportunidades. Después de subir a una patera, por la que pagó cuanto tenía, llegó a Lanzarote a los 13 años, sin conocer siquiera el idioma. Tras pasar por el centro de acogida de menores migrantes de La Santa, y gracias al apoyo de uno de sus educadores, acabó defendiendo el escudo del C.D. Orientación Marítima de Arrecife, que se ha convertido en su familia elegida.
Samoura Cheikne viajó con mala mar en una precaria embarcación que finalmente les llevó hasta la costa tinerfeña. Mientras estaba internado en un centro de acogida, vio en la televisión un programa de lucha canaria. Empezó a practicar este deporte en la playa, con algunos educadores y trabajadores del centro, hasta que conoció el Club de Lucha Tacoronte.