El equipo tinerfeño superó al Bilbao por 86-75 y se clasificó para el torneo que se celebrará en Gran Canaria
La Laguna Tenerife logró el triunfo por 86-75 contra el Surne Bilbao Basket este sábado en el pabellón Santiago Martín. Aunque la victoria fue relativamente cómoda, el partido estuvo muy igualado hasta el último cuarto. El equipo bilbaíno, con un rival peleón, también tenía opciones de estar entre los ocho primeros de la liga.
Como en el partido anterior ante el Casademont Zaragoza, los tinerfeños debieron esperar al último cuarto para romper la igualdad. Lluis Costa y Abromaitis marcaron la diferencia con triples clave. A partir de ahí, el equipo local mantuvo el control hasta el final.
Primeros compases de igualdad
La primera mitad fue muy equilibrada. Aunque La Laguna Tenerife comenzó mandando, el Bilbao pronto igualó el marcador. Pantzar y Jones aportaron frescura al ataque bilbaíno, llevando a su equipo a un parcial de 14-19 en el primer cuarto, que terminó 19-24.
En el segundo cuarto, los tinerfeños mostraron falta de intensidad defensiva y de puntería en ataque. A pesar de ello, el Surne Bilbao no aprovechó las debilidades de su rival para tomar una ventaja significativa. La reacción tinerfeña llegó con Marcelinho Huertas, quien anotó siete puntos consecutivos. Un parcial de 15-2 dejó a los locales por delante (34-29), pero el Bilbao igualó al descanso con un 40-42.
Triples decisivos
En la segunda mitad, David Kramer fue clave al anotar dos triples. Esto permitió que La Laguna Tenerife recuperara ventaja y comenzara a pensar en el triunfo. El Bilbao, pese a una gran defensa, no logró anotar con facilidad. Hlinason y Dragic no encontraron el camino hacia la canasta.
Cuando el marcador se encontraba en 78-64, Lluis Costa y Abromaitis con sus triples, sellaron la victoria para el equipo tinerfeño. Con la dirección de Huertas, el equipo mantuvo su ventaja y se garantizó su plaza en la Copa del Rey.
Con la clasificación asegurada, La Laguna Tenerife piensa ahora en sus próximos objetivos, como intentar ser cabeza de serie en el torneo.