La controvertida ley fue anunciada como una reforma para reforzar la protección del menor frente a delitos de pedofilia pero incluye medidas que discriminan y estigmatizan al colectivo LQTBIQ
El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, ha afirmado este jueves que no retirará la polémica ley que discrimina al colectivo LGTBIQ y ha invitado a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE críticos con la medida a leerse el texto porque «no va sobre homosexuales» sino «los derechos de los niños y sus padres».
En declaraciones antes de participar en la cumbre de líderes europeos en Bruselas, el primer ministro húngaro se ha descrito como un «luchador por la libertad» y ha enfatizado que la ley da a los padres la capacidad de «decidir cómo educar sexualmente» a sus hijos y no discrimina a ningún colectivo.
«Soy un luchador por los derechos, fui un luchador por la libertad en el régimen comunista, en el que la homosexualidad fue castigada», ha reivindicado. «Defiendo los derechos de los homosexuales, pero esta ley no es sobre esto, va sobre los derechos de los niños y sus padres», ha añadido.
Preguntado por si retirará dicha normativa, Orbán ha contestado que está «anunciada y publicada», dando a entender que no contempla la posibilidad de derogarla. Además, ha acusado a quienes la critican de no haberse leído el texto.
«Siempre es mejor leer primero y reaccionar después, es el orden correcto», ha sentenciado el primer ministro de Hungría, quien ha asegurado que su gobierno ya respondió «inmediatamente» a las criticas y eso incluye la carta que 17 jefes de Estado y de Gobierno de la UE han publicado este jueves llaman a combatir la discriminación hacia el colectivo LGTBIQ, aunque sin mencionar a Hungría.
Controvertida ley
La controvertida ley fue anunciada como una reforma para reforzar la protección del menor frente a delitos de pedofilia pero incluye medidas que discriminan y estigmatizan al colectivo LQTBIQ, por ejemplo prohibiendo charlas sobre homosexualidad en las escuelas o vetando la difusión en televisión de contenidos que aborden la situación del colectivo LGTBIQ.
La Unión Europea mostró cierta tibieza durante la tramitación de la norma pero el tono fue elevándose desde las capitales cuando el Parlamento húngaro dio luz verde a la reforma -con un solo voto en contra– la semana pasada.
Con la promulgación de la ley por el presidente del país el miércoles, la jefa del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, calificó de «vergüenza» esta violación de derechos fundamentales en la UE y anunció que empleará «todos los poderes de la Comisión» Europea para proteger a los europeos, «sean quienes sean y vivan donde vivan.