En Lanzarote, miles de fieles acompañaron a Virgen de los Dolores en su vuelta a la ermita en una jornada marcada por la historia y la devoción
Cortes de carretera por la Subida de la Virgen de los Dolores 2024
Este domingo, la Virgen de Los Dolores comenzó su regreso a la ermita de Mancha Blanca, tras pasar varios días en Arrecife. La procesión partió a las 6 de la mañana, después de la Oración Mariana celebrada en la iglesia de San Ginés. Unas 1.300 personas la acompañaron en su trayecto, según estimaciones del Consorcio de Emergencias.
De las carreteras que permanecían cerradas por el paso de la Virgen, ya ha abierto la LZ-30.
Una Bajada histórica
Esta es la tercera Bajada de Los Dolores a Arrecife, un evento que no ocurría desde 1959. La última vez que la Virgen llegó a la ciudad fue en 1939. Este regreso tiene una gran carga simbólica, ya que coincide con el 225 aniversario de la fundación de Arrecife como municipio. Además, se rememoran los 200 años de la erupción del volcán de La Capellanía de Tao, en 1824, un hecho que marcó la historia de Lanzarote.
Devoción popular por la Virgen de Los Dolores
La presencia de la Virgen de Los Dolores en Arrecife ha generado una gran expectación. Durante su estancia, miles de fieles se acercaron a rendir homenaje a la patrona de Lanzarote. Esta procesión no solo es una manifestación religiosa, sino también un acto de identidad para los habitantes de la isla. La multitud, unida por la devoción, acompañó a la Virgen en todo su recorrido por la ciudad.
Su regreso a la ermita de Mancha Blanca cierra un ciclo de celebraciones en las que la presencia de la Virgen de Los Dolores ha estado acompañada de diferentes actos litúrgicos y culturales.