El Gobierno de Canarias ha ejecutado una campaña de medición en el frente marítimo comprendido desde La Bufona hasta el Islote del Francés, y el tramo de costa de Las Caletas
Transición analiza el litoral de Lanzarote para prevenir los efectos de la erosión y la subida del mar. La Consejería de Transición Ecológica y Energía del Gobierno de Canarias ha ejecutado una campaña de medición en el frente marítimo comprendido desde La Bufona hasta el Islote del Francés, y el tramo de costa de Las Caletas, en el municipio de Arrecife.

Según informa el departamento regional en una nota de prensa, el objetivo es conocer la profundidad, el relieve submarino y la composición del fondo marino, con el fin de planificar medidas de adaptación ante la subida del nivel del mar y la erosión costera de Lanzarote.
El presupuesto para analizar estas seis áreas en toda Canarias asciende a 111.300 euros, mientras que el proyecto que lo integra, el ADAPTACOST6, cuenta con una inversión total de 2.317.300 euros.
Al respecto, el consejero de Transición Ecológica y Energía, Mariano Zapata, subrayó que «Arrecife es uno de los principales enclaves que puede sufrir los efectos del cambio climático en el archipiélago, dado que en este tramo del frente marítimo de la ciudad se comprometería tanto el tejido urbano y económico de alto valor como los espacios públicos recreativos, y las infraestructuras y equipamientos, así como un notable conjunto de bienes del patrimonio histórico y cultural».
Diversos escenarios climáticos
«La Consejería -subrayó- trabaja en estos estudios para contar con información científica de alta precisión nos permita anticiparnos a los riesgos y diseñar soluciones de adaptación claras y eficaces que garanticen la seguridad de la población y de los servicios esenciales en las próximas décadas».
Asimismo, Zapata recordó que, con los datos obtenidos, «se elaborarán escenarios climáticos de alta resolución para el año 2050, que permitirán simular diferentes situaciones de inundación y erosión, lo que constituye la base para priorizar y dimensionar medidas de adaptación dentro de la estrategia de resiliencia costera de Canarias». Aquí, uno de los principales objetivos, explicó el consejero, «es contar con datos científicos que nos ayuden a proteger a la población de esos efectos que puedan producirse».
Por su parte, el alcalde de Arrecife, Yonathan de León, ha resaltado que conocer «estas previsiones futuras nos permitirá planificar mejor las actuaciones en el frente marítimo de la ciudad». «Nacimos como ciudad costera, y sabemos que hay retos importantes al ser un municipio nacido en la desembocadura natural de los barrancos en la periferia norte de Arrecife, junto a San Bartolomé y Teguise, teniendo el centro neurálgico de la capital de la isla a unos metros de la marea, al mismo nivel del mar. Unos niveles que irán subiendo en la segunda mitad de este siglo XXI», observó.
Cartografía submarina de tres zonas
La actuación realizada en el litoral de Lanzarote ha permitido elaborar una cartografía submarina de tres zonas: el Charco de San Ginés, con una superficie de 6,27 hectáreas; la zona este, desde el sur hasta el espigón del puerto, con 200,63 hectáreas; y la zona oeste, desde el espigón hacia el norte, con 301,36 hectáreas. Además, se tomaron muestras de sedimentos para analizar la textura y las características del fondo marino.
Los trabajos han sido realizados por la empresa ECOS, Estudios Ambientales y Oceanografía S.L., contratada por TRAGSATEC, entidad responsable de la coordinación del proyecto ADAPTACOST6.
Las campañas de campo se desarrollaron entre los meses de junio y agosto de 2025, utilizando ecosonda multihaz, navegación inercial y técnicas de compensación de movimiento para garantizar la precisión de los resultados.
Finalmente, la Consejería señaló que el estudio de Arrecife forma parte del encargo ADAPTACOST6, que incluye un total de seis zonas del litoral canario en las islas de Fuerteventura, La Palma, La Gomera, Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote.