El expresidente tendrá posiblemente como máximo rival en la carrera republicana a las presidenciales de 2024 al gobernador de Florida, Ron DeSantis
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha presentado de manera oficial su candidatura a las elecciones presidenciales de 2024 afirmando sus intenciones de «hacer América grande y gloriosa otra vez».
«Con el fin de hacer que América sea grande y gloriosa otra vez, esta noche anuncio mi candidatura a presidente de Estados Unidos», ha aseverado Trump entre aplausos desde su residencia en Florida de Mar-a-Lago, según ha detallado en declaraciones a los medios.
Haciendo alusiones a su derrota –que aún no ha reconocido– en las pasadas elecciones presidenciales de 2020, el exmandatario estadounidense ha detallado que ese hito «no fue el final», sino «solo el comienzo» de su lucha por «rescatar el sueño americano».
«Hace dos años, cuando dejé la Casa Blanca, Estados Unidos estaba listo para mi edad de oro», ha afirmado Trump enumerando algunos de los logros de su administración, como las medidas llevadas a cabo durante la pandemia de la COVID-19.
Trump justifica su candidatura
En este sentido, ha justificado su candidatura sosteniendo que «esta» no es su campaña, si no «nuestra campaña» ya que «la única fuerza lo suficientemente fuerte como para derrotar la corrupción masiva a la que se enfrenta el país es el pueblo estadounidense».
«El pueblo de Estados Unidos es la mejor gente en el mundo, los queremos a todos y amamos los dos bandos. (Nosotros) vamos a juntar y a unir a la gente», ha dicho el expresidente en su discurso.
Trump llevaba semanas insinuando sus planes para presentar su candidatura a las primarias republicanas y había confirmado sus planes de hacer «un gran anuncio» este mismo martes.
El magnate deberá enfrentarse con casi toda probabilidad al actual gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien ha recabado el apoyo de parte del Partido Republicano tras sus buenos resultados en las elecciones de medio mandato celebradas la semana pasada.
DeSantis, principal rival de Trump
DeSantis es visto como el principal rival de Trump para la nominación en las elecciones de 2024, sobre todo tras las críticas que ahora más que nunca han comenzado a aflorar entre los republicanos por la desafortunada participación del expresidente en estas últimas legislativas.
En tanto, y tras conocerse la posibilidad de que el gobernador de Florida presente su candidatura a las primarias republicanas, el expresidente estadounidense se burló de su compañero de partido asegurando que él mismo contaba con un 71 por ciento de apoyo entre la militancia, frente a un 10 por ciento de aprobación para DeSantis.
Enfrentamiento a la historia: solo un expresidente logró volver a la Casa Blanca
Después de su anuncio de este martes Donald Trump ha pasado a formar parte de un reducido grupo de seis expresidentes de Estados Unidos que tras tener que dejar la Casa Blanca intenta nuevamente volver a ella. Así, en caso de lograrlo hará historia y será el segundo que lo consigue desde Stephen Grover Cleveland a finales del siglo XIX.
Si bien ambos comparten la misma aspiración de volver a la Casa Blanca, el estilo de uno y otro está lejos de ser similar siquiera un poco.
Trump dejó el cargo llamando a la rebelión y acusando sin pruebas de que fue víctima de fraude. Cleveland, por su parte, cedió el mando pacíficamente tras su mandato e incluso sostuvo un paraguas sobre el nuevo presidente mientras pronunciaba su discurso de investidura.
Por algo era llamado ‘Grover el Bueno’ después de las reformas que llevó a cabo como alcalde de Búfalo y gobernador de Nueva York. Al igual que Trump, perdió la reelección entre acusaciones de fraude electoral, aunque en su caso se demostró que hubo irregularidades en algunos estados, especialmente en Indiana.
El caso Trump
La historia dice que la hipotética vuelta de Trump sería todo un acontecimiento histórico a tenor de los escasos antecedentes de éxito que tuvieron los otros expresidentes.
Al igual que la segunda candidatura de Martin Van Buren, Trump podría estar interesado en volver a la Casa Blanca para afianzar también su poder al frente del movimiento más conservador de la política estadounidense y con ello dar forma a un Partido Republicano en el que cada vez hay más voces que cuestionan el liderazgo de facto que ha asumido en los últimos años.
La venganza contra sus rivales políticos tampoco se descarta después de un convulso mandato repleto de críticas en su contra y dos juicios políticos a los que tuvo que hacer frente, haciendo historia aquí también, saliendo airoso de ellos.
El tiempo dirá si Trump se convierte en la segunda excepción dentro de otro episodio de la historia de Estados Unidos o si, por el contrario, se une al resto de selectos perdedores de los que siempre ha renegado.