Hoy en nuestra sección de Igualdad con Noemi Galván vamos hablar sobre el incremento de las agresiones sexuales bajo sumisiones químicas de la mano de María José Melian, directora del instituto de medicina legal y ciencias forenses de las palmas.
Las agresiones sexuales bajo sumisión química son aquellas que emplean sustancias químicas y que anulan la voluntad de la mujer. Tradicionalmente se usa el fentanilo, la ketamina, el ácido lisérgico y la escopolamina, conocida popularmente como ‘Burundanga’.
Estas son las drogas consideradas para la sumisión química, aunque existen otras, como pueden ser el alcohol, el cannabis, la cocaína, que, aunque no anulan la voluntad, cree que deberían tener la misma consideración por la facilidad al acceso a las mismas.
Nos dice que se ven agresiones sexuales en mujeres que han consumido sustancias que a veces no se identifican, como pueden ser las benzodiacepinas mezcladas con alcohol o con el cannabis.
Nos cuenta que las personas que sufren agresiones sexuales relatan con frecuencia que ‘no saben lo que les paso’, pero que hay una parte del relato que indica que pudo haber un ‘consumo de sustancias’.
También nos cuenta que el instituto nacional de toxicología dicto hace mas de 10 años unas normas y recomendaciones con la toma de muestras en los casos de sumisión química.
Añade, que este mes el consejo nacional medico forense ha publicado un protocolo de atención a victimas de agresiones sexuales que recoge todas las pasibilidades, y todo tipo de actuaciones.