Desde la Fiscalía Anticorrupción señalan que el exministro de Transportes tuvo un papel principal en la trama conocida como «Caso Koldo»
La Fiscalía Anticorrupción no tiene dudas de que el exministro de Transportes José Luis Ábalos tuvo «un papel principal» en el llamado caso Koldo pues para que la adjudicación de los contratos a la trama «se desarrollara con éxito» tenía que estar «avalada» por el titular del ministerio.
Así lo expone el fiscal del caso, Luis Pastor, en el escrito de 21 folios, al que ha tenido acceso EFE, en el que pide al juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, que active los trámites para que el Supremo le abra una investigación a Ábalos, dada su condición de aforado, por los delitos de organización criminal, tráfico de influencias y cohecho.
El fiscal hace suyo el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que señala a Ábalos como pieza clave en la trama, y sostiene que los contratos adjudicados a Soluciones de Gestión «se gestaron en un contexto marcado por la premisa de que Víctor de Aldama, con la acción permanente de Koldo García Izaguirre como intermediario, tenía un nivel de acceso prácticamente ilimitado a la esfera del Ministerio, incluido el propio ministro».
El escrito asegura que «es difícil entender la operativa de la trama sin la participación de José Luis Ábalos
«Resulta difícil entender la operativa desarrollada por Koldo García Izaguirre y Víctor de Aldama Delgado sin la participación de José Luis Ábalos Meco, tal y como se recoge en el informe de la UCO, ya que el inicio de la relación se produce como consecuencia de que el jefe de la escolta de este último era el hermano de Víctor de Aldama, teniendo su primer contacto el 31 de agosto de 2018″, poco más de dos meses de acceder al cargo de ministro, apunta el escrito.
Para pedir su imputación, la Fiscalía se apoya asimismo en las distintas declaraciones de responsables entonces del ministerio, como la de Jesús Gómez García, en aquel momento subsecretario del ministerio y que manifestó que cuando Koldo le transmitió la decisión final de comprar ocho millones «entendió que le transmitía voluntad del ministro».
Esta consideración también fue avalada en su declaración por quien entonces era el director general de Inspección y Organización del ministerio, Javier Sánchez Fuentefría, que dijo que quien toma la decisión final de comprar ocho millones de mascarillas «es el ministro».