El Cabildo de Tenerife corta el acceso a los senderos del Parque Nacional del Teide por la prealerta por viento decretada por el Gobierno de Canarias
El Cabildo de Tenerife cerró el acceso a pie de los senderos del Parque Nacional del Teide desde las 00:00 horas del sábado 21 de diciembre. La medida busca garantizar la seguridad de las personas tras la declaración de prealerta por viento emitida por el Gobierno de Canarias.
Prealerta por viento
La Dirección General de Emergencias, basada en la predicción de AEMET y otras fuentes, decretó prealerta en el Macizo de Teno, Cordillera Dorsal y el Teide. Se esperan rachas de viento de 30-50 km/h en cumbres y de 70-80 km/h en el Teide, con posibles precipitaciones durante el fin de semana.
Senderos cerrados
Los senderos afectados incluyen:
- Sendero nº 7: Montaña Blanca-Pico Teide.
- Sendero nº 9: Teide-Pico Viejo-TF-38.
- Sendero nº 10: Telesforo Bravo.
- Sendero nº 11: Mirador de La Fortaleza.
- Sendero nº 12: Mirador de Pico Viejo.
- Sendero nº 23: Regatones Negros.
- Sendero nº 28: Chafarí.
También están cerrados los tramos comprendidos entre la cima de Montaña Blanca y el punto de contacto entre los senderos nº 7 y nº 11 (Mirador de La Fortaleza); y el tramo comprendido entre las confluencias del sendero nº 9 con los senderos nº 38 (Cuevas Negras) y nº 12 (Mirador de Pico Viejo).
Normativa activa para situaciones adversas
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, explicó que la normativa de cierre, activa desde el 30 de noviembre, prohíbe el acceso al público en situaciones de alerta oficial por fenómenos meteorológicos adversos.
Sanciones para los incumplidores
Multas de hasta 600 euros y posibles tasas de rescate, que oscilan entre 2.000 y 12.000 euros, se aplicarán a quienes infrinjan las restricciones. La consejera insular de Medio Natural, Blanca Pérez, subrayó la importancia de respetar las normas para evitar accidentes.
Un llamado a la prudencia
Las autoridades insisten en la necesidad de evitar riesgos. El cierre de los senderos es una medida esencial para proteger a los visitantes en condiciones climáticas desfavorables.