Durante este año han aflorado 3.500 puestos irregulares con Inspección de trabajo.
Inspección de Trabajo, en colaboración con el Gobierno de Canarias, inicia este lunes 13 de noviembre una campaña para perseguir la economía sumergida. Un plan de choque de 21 días .
Para la ejecución de esta campaña, 23 inspectores llegados de todas las provincias se incorporan al plan. Prentenden detectar otros 200 puestos de trabajo irregulares. Y que además otros tantos se puedan regularizar por «su importante efecto inducido». Ya que esta iniciativa propiciará, que muchos empresarios «llamen» este mismo lunes «a sus asesores para dar de alta a trabajadores».
Se trata del Plan Especial de Actuación Inspectora, que impulsa la Consejería regional de Empleo y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, según han explicado la consejera Jéssica de León y el responsable en Canarias de este departamento de la Administración estatal, Francisco Gundín. Quien ha destacado que estas campañas se desarrollan cada año en Canarias y Baleares, por el «compromiso» de sus gobiernos en la materia.
«Con esto conseguimos que, además de los 119 funcionarios que trabajamos aquí en la Inspección, vengan 23 inspectores de trabajo social y subinspectores de empleo y seguridad social de otras provincias, quienes realizarán unas mil visitas a centros de trabajo de todos los sectores, especialmente de hostelería, restauración, comercio y otros servicios, donde se detecta más economía sumergida», ha detallado Gundín.
Gundín ha explicado que las irregulares que se suelen esclarecer con estos planes de choque aluden a supuestos de economía sumergida «pura y dura», esto es, el de trabajadores que no están dados de alta en la Seguridad Social, y otros que se dan en centros de trabajo donde los contratos parciales están muy por debajo de la actividad ordinaria, es decir, cuando hay «cinco trabajadores de una empresa de diez que tienen declaradas sólo tres o cuatro horas semanales, lo que hace difícil llevar una actividad económica».
De los 3.500 empleos irregulares que Trabajo hace aflorar al año en Canarias, 2.000 son por falta de alta, 1.000 son trabajadores con jornadas declaradas muy inferiores a las que realmente realizan y otros supuestos son trabajadores que están cobrando una prestación por desempleo o extranjeros sin permisos de trabajo.
Las sanciones por estas infraccionessuponen multas de 3.750 euros por cada trabajador no dado de alta en la Seguridad Social. 12.000 euros por cada empleado que esté cobrando el desempleo, o por tener trabajando a un extranjero sin permiso.
«No es una buena inversión tener a gente sin dar de alta», ha apostillado Gundín
Gundín ha informado de que el 40% de las 60.000 visitas ordinarias que realiza al año la Inspección, responden a denuncias anónimas de afectados por algún tipo de fraude. El resto son planificadas.
Se han aflorado en los últimos cinco años en Canarias unos 20.000 empleos ha resaltado. La consejera canaria de Empleo, Jéssica de León, ha explicado que este plan lo desarrollarán cuatro grupos de trabajo. Estos estarán stablecidos en Gran Canaria, Tenerife, Fuerteventura y Lanzarote que realizarán visitas a todas las islas.