Este pasado fin de semana, los cubanos han salido a la calles para formar parte de una manifestación que se considera histórica para expresar su frustración por la mala gestión de la pandemia y la escasez de bienes básicos
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ha comparecido este domingo en la televisión cubana para hacer un llamamiento a la población a salir a las calles para defender la revolución ante las protestas que se han producido en las últimas horas en las principales ciudades cubanas.
«Convocamos a todos los revolucionarios a salir a las calles a defender la revolución en todos los lugares», ha declarado Díaz-Canel en su intervención, retransmitida a partir de las 16.00 horas (22.00 hora peninsular española). «No vamos a entregar la soberanía de nuestra Patria», ha remachado.
El mandatario cubano ha destacado que ya se había avisado de «las complejidades de los momentos actuales». «Les recuerdo que hace más de un año y medio cuando se iniciaba el segundo semestre del año 2019 tuvimos que explicar que íbamos a una coyuntura difícil», ha indicado, al tiempo que ha responsabilizado de la situación al Gobierno de Estados Unidos, «encabezados por la administración (de Donald) Trump».
Así, se ha referido al «recrudecimiento del bloqueo (…) con el objetivo de asfixiar nuestra economía y que eso provocara el anhelado estallido social masivo».
«En este contexto de asfixia se suspendió el envío de remesas desde Estados Unidos a las familias cubanas, se realizaron campañas internacionales de descrédito a las misiones médicas cubanas, dos fuentes de entrada de dinero al país», ha argumentado.
Todos estos hechos «fueron provocando un desabastecimiento de insumos, de recursos para el normal desarrollo de la economía cubana, y para la producción y distribución de bienes y recursos, lo que ha derivado en un grupo de insatisfacciones, ha acrecentado un grupo de problemas ya existentes y que no hemos podido resolver», ha reconocido.
«Todo esto unido a la fuerte campaña de desacreditación que pretende poner en crisis y romper el vínculo entre el Partido, el Gobierno y el pueblo cubano», ha apuntado.
«Acciones de desestabilización»
Díaz-Canel se ha referido a «acciones de desestabilización política» contra Cuba obra de Estados Unidos y que se habrían intensificado particularmente durante la pandemia.
Dos son los problemas específicos a los que se ha referido el presidente cubano: el energético, que impacta directamente en el servicio eléctrico en los hogares, y el de los medicamentos, en un escenario en el cual han aumentado los enfermos y por tanto el consumo de medicinas. «Tendremos que avanzar hacia la experiencia del ingreso domiciliario debido a la situación actual con la COVID-19», ha anunciado.
Díaz-Canel se ha referido abiertamente a lo ocurrido en San Antonio de los Baños, donde «un grupo de personas se agrupó en uno de los parques más céntricos para reclamar». «Incluso se unieron personas revolucionarias que pueden estar confundidas por la desinformación que hay en las redes sociales», ha explicado.
Medios opositores como Martí Noticias, con sede en Miami, ha informado de un «levantamiento popular» en el que «miles de cubanos se lanzaron a la calle» y publica vídeos de redes sociales de manifestaciones en el Malecón de La Habana, Santiago, Santa Clara, Ciego de Ávila, Camagüey, Bayamo, Guantánamo, San José de las Lajas, Holguín, Cárdenas y también en puntos del exterior, como la Puerta del Sol de Madrid.