El delegado del Gobierno en Andalucía niega haya un grupo de niños ucranianos no acompañados perdidos en España en un viaje que debían hacer desde Huelva a Gran Canaria
El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha descartado este lunes que haya un grupo de niños ucranianos no acompañados perdidos en España en un viaje que debían hacer desde Huelva a Gran Canaria.
A preguntas de los periodistas durante un acto en Granada, ha explicado que, ante las informaciones recibidas sobre el posibles traslado de un grupo de unos 30 ó 40 menores, el Ejecutivo activó controles especiales en la dársena onubense durante la pasada semana. Esos controles, ha añadido, no han no han detectado a ningún grupo de menores procedentes de Ucrania.
Según publicó el domingo el diario El País, se trataría de entre 30 y 40 menores ucranianos que habrían llegado a España con una ciudadana de la misma nacionalidad. Residente en Fuerteventura y responsable de su traslado.
Sin embargo, los controles especiales realizados por agentes de Policía Nacional y Guardia Civil tanto en el puerto de Huelva como en Gran Canaria, con una inspección especial de cada transbordador con destino a las islas, no han encontrado «indicios» que respalden que existe de verdad ese grupo de menores.
Situación «dramática y preocupante»
Fernández ha reconocido que se trata de una situación «dramática y preocupante«. Sin embargo ha añadido que de momento se descarta que ese grupo de niños llegara a España. Ha apostado por tomar «todas las medidas» para evitar que puedan producirse situaciones así.
Por su parte, la Dirección General Protección de la Infancia del Gobierno de Canarias ha apuntado que la Policía les ha confirmado que tenían información de que ese grupo de menores ucranianos iba a llegar a Huelva, pero que también no hay constancia de que embarcaran rumbo a las islas.
Su responsable, Iratxe Serrano, está en contacto con la Dirección General de la Infancia de la Junta de Andalucía, que tampoco tiene noticias de esos menores, porque no han pasado hasta la fecha por ninguno de sus recursos ni les han dado cuenta de su llegada.
Esta situación viene precedida por la llegada de otro grupo de 16 niños con edades comprendidas entre los 18 meses y los 17 años que aterrizó en Fuerteventura el 11 de marzo. Fue en un vuelo procedente de Hungría con tres mujeres adultas a su cargo. Un viaje que fue organizado por una ciudadana ucraniana residente en La Oliva, Natalia Karpukhina, con el apoyo del Ayuntamiento de esa localidad.
Iniciativa de una mujer ucraniana residente en Fuerteventura
Tras la llegada de ese grupo, el 24 de marzo la Dirección General de Protección a Infancia de Canarias recibe información a través de la Delegación del Gobierno de que podía viajar a la isla otro grupo de 30-40 menores. Por iniciativa de esa misma persona, que tiene una escuela de surf en La Oliva y está en contacto con varias familias de su país que quieren enviar a sus hijos lejos de la guerra.
Serrano asegura que habló entonces con Karpukhina, que le confirmó que se estaba organizando ese traslado y que posiblemente habría más, por la cantidad de llamadas que estaban recibiendo de familias de Ucrania. La directora general también se dirigió en ese momento al Ayuntamiento, que le aclaró que esta vez no tenían nada que ver.
Un portavoz del equipo de gobierno de La Oliva le ha confirmado eso mismo. Sabían que podía estar al llegar un segundo grupo, pero el Ayuntamiento esta vez no participaba. Entre otras cosas porque no le quedan ya plazas de acogida en el albergue municipal.
«Es todo una imprudencia. Yo presupongo a esas personas la mejor voluntad, pero solo se la presupongo, no la puedo garantizar. Me da miedo que esos niños terminen en una situación de vulnerabilidad aún mayor. Estamos con el corazón en un puño«, ha reconocido la directora general del Gobierno canario.