El Supremo otorga una inmunidad parcial a Trump durante su tiempo al frente de la Casa Blanca y dilata el proceso penal ante la Justicia
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha avalado que el expresidente Donald Trump contaba con cierta inmunidad durante su tiempo al frente de la Casa Blanca y dilata el proceso penal ante la Justicia por los cargos presentados contra el magnate neoyorquino por tratar supuestamente de revertir los resultados electorales tras las elecciones de noviembre de 2020 en las que perdió frente al actual presidente, Joe Biden.
La corte ha dictaminado así que Trump goza, efectivamente, de la inmunidad reservada en Estados Unidos al presidente durante los actos oficiales, si bien apunta a que no todos los actos en los que participó el exmandatario pueden ser calificados de esta forma, por lo que descarta la tan ansiada inmunidad total solicitada por Trump para evitar ser juzgado justo antes de que se celebren las elecciones de noviembre.
«Concluimos que siguiendo la estructura constitucional que favorece la separación de poderes, la naturaleza del poder presidencial requiere que el presidente en cuestión goce de cierta inmunidad ante procesos penales en el marco de actos oficiales durante su mandato», ha señalado el magistrado y presidente del Supremo, John Roberts.
«Al menos en lo que respecta al ejercicio de los poderes constitucionales que se otorga al presidente, esta inmunidad debe ser absoluta», ha aclarado Roberts, según informaciones recogidas por la cadena de televisión CNN.
Espaldarazo para Trump
El fallo supone un espaldarazo para Trump, que lo ha calificado como «una gran victoria para la Constitución y la democracia» en plena campaña electoral para hacerse nuevamente con la Presidencia en próximos comicios. «Orgulloso de ser estadounidense», ha proclamado en redes sociales.
Así, la Justicia estadounidense concede a los tribunales de menor instancia la posibilidad de resolver por su cuenta en qué casos Trump se encontraba en pleno desempeño de sus funciones como presidente y cuándo estos casos eran puramente personales y se escapaban del oficialismo –y por tanto no quedan protegidos por esta inmunidad parcial–.
Esta decisión dificulta que sea juzgado en relación con el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, en el que murieron cinco personas –uno de ellos un agente de Policía– y otras 14 resultaron heridas. «Pedimos al tribunal de distrito que determine en primera instancia si la conducta de Trump en este caso entra en la categoría de oficial o no oficial», ha aseverado Roberts.
Proceso de votación
La votación en el seno de la corte se ha resuelto con seis votos a favor y tres en contra. La magistrada Sonia Sotomayor ha mostrado su rechazo a la medida adoptada y ha lamentado que esta permite al expresidente «violar la ley». «Dejemos que explote los entresijos de su Administración para su victoria personal, dejemos que use el poder para objetivos perversos», ha dicho tras conocerse el veredicto.
En este sentido, ha lamentado que, en caso de volver a ejercer la presidencia, Trump podría «no ser tan audaz y valiente como nos gustaría que fuera en caso de saber que puede enfrentarse a responsabilidades penales por violar la ley». «Incluso si esto nunca llega a darse, el daño ya está hecho. La relación entre el presidente y el pueblo al que sirve ha cambiado irrevocablemente. Encada uso del poder oficial, el presidente es ahora un rey por encima de la ley», ha lamentado.
«¿Si ordena a los Marines asesinar a un rival político? Es inmune. ¿Si organiza un golpe de Estado para mantenerse en el poder? Inmune. ¿Si acepta un soborno a cambio de un indulto? Inmune. Inmune, inmune, inmune», ha aseverado antes de recalcar que ha votado en contra del fallo por «miedo a que la democracia se pierda».
Escenario peligroso
A ella se ha sumado la magistrada Kentaji Brown Jackson, que ha apuntado a que la decisión de la corte abre la puerta a una escenario «peligroso» en el país norteamericano y pone en la cuerda floja el más antiguo principio, el de que «nadie está por encima de la ley».
«Ese principio central se ha preservado en nuestro país y ha evitado que evolucione hacia el nepotismo. Aún así, la corte ha optado por cambiar eso para cualquier futuro presidente que esté dispuesto a sobrepasar cualquier límite impuesto por el Congreso», ha puntualizado.
Desde la campaña de Biden también han criticado la medida y han asegurado que la decisión judicial «no cambia los hechos» de que Trump se vio involucrado en un delito de incitación de la rebelión por instar aquel 6 de enero a sus seguidores a asaltar el Congreso de Estados Unidos después de rechazar los resultados electorales que confirmaban su victoria.
«Donald Trump pidió a una turba de seguidores que echara por tierra los resultados de unas elecciones que fueron libres y justas», ha aclarado un alto cargo de la campaña de Biden en un comunicado en el que ha aseverado que Trump «ya se está presentando nuevamente a unas elecciones como convicto porque considera que está por encima de la ley».
Librarse de ser juzgado
El fallo de este lunes podría llevar a Trump a librarse de ser juzgado por este caso antes de la celebración de las presidenciales. Sin embargo, la corte ha rechazado contundentemente la postura del magnate sobre el ‘impeachment’ y ha aclarado que sí puede ser juzgado por la vía penal a pesar de no haber sido destituido por el Congreso.
El expresidente ha manifestado en varias ocasiones que solo los presidentes destituidos de esta forma pueden ser posteriormente juzgados por delitos cometidos durante su mandato, algo que ha sido rechazado ahora por el Supremo.
«El ‘impeachment’ es un proceso político que permite al Congreso destituir al presidente. Transformar ese proceso político en un paso necesario en la aplicación del derecho penal tiene poca cabida en la Constitución o en la estructura de nuestro Gobierno», ha puntualizado Roberts.