Un estudio de la Universidad de La Laguna analiza el peligro de inundaciones en el municipio
Las inundaciones representan uno de los desastres naturales más devastadores a nivel mundial, causando alrededor de 5.000 muertes anuales y significativas pérdidas económicas. En Santa Cruz de Tenerife, la ciudad ha experimentado inundaciones repentinas, en parte debido a su geografía montañosa y volcánica, que complica la predicción de estos fenómenos. El cambio climático agrava la situación, aumentando la intensidad de las lluvias. Sin embargo, la urbanización descontrolada y el sellado del suelo emergen como las causas más relevantes.
Un estudio reciente de la Cátedra Reducción del Riesgos de Desastres y Ciudades Resilientes de la Universidad de La Laguna, analiza la vulnerabilidad de Santa Cruz de Tenerife a las inundaciones. Los investigadores revisaron más de 1.000 puntos de daño histórico, identificando que más de la mitad proviene de desbordamientos de cauces. La falta de infraestructura de drenaje adecuada y los problemas de escorrentía se destacan como factores críticos.
Un riesgo creciente para el municipio
Santa Cruz de Tenerife, con una población de aproximada de 205.000 habitantes, se considera el municipio más afectado por inundaciones en la isla. En este sentido, el Ministerio de Transición Ecológica ha identificado ocho zonas de alto riesgo de inundaciones y tres de ellas se encuentran en esta ciudad. La lluvia más intensa registrada ocurrió el 31 de marzo de 2002, con 232 litros por metro cuadrado en solo dos horas, dejando como resultado ocho muertes y pérdidas por valor de 43 millones de euros.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista Science Direct, revela que el área más vulnerable abarca sectores con cauces de agua desaparecidos o modificados. La urbanización ha llevado a la autoconstrucción en barrancos, aumentando la susceptibilidad a inundaciones. Para abordar estos problemas, los investigadores proponen un mapa de susceptibilidad que permita identificar áreas en peligro y sugieren establecer una red de monitoreo para mejorar la gestión del riesgo.
Con la expectativa de que el cambio climático intensifique los eventos de lluvia, se hace urgente optimizar la infraestructura de drenaje. La investigación concluye que los futuros análisis deben incorporar proyecciones climáticas para mitigar el riesgo de desastres en Santa Cruz de Tenerife.