El consumo local, con la producción de huertos en la zona que conlleva, ayuda a frenar la propagación de las llamas
El Cabildo de Gran Canaria apuesta por evitar los incendios devolviéndole al campo el uso que siempre ha tenido y fomentando el consumo local. El motivo radica en que, si la tierra da sus frutos, podría frenar la propagación de las llamas.
«Hay un montón de usos del monte que pueden beneficiar a la prevención de incendios», informa Federico Grillo, Jefe de Emergencias del Gobierno de Canarias. «Políticas de consumo de lo local, kilómetro 0, el consumo de lo que produce el agricultor en la zona. Las huertas son muy buenos frenos de los incendios».
Por ello, y en palabras de Grillo, es «muy importante» que el interior de los pueblos y alrededores
«estén cultivados», ya que «cada vez más vamos a tener incendios que lanzan cenizas sobre los pueblos», añade.
Así, gestionar el territorio antes de que se produzca la primera chispa ayuda a extinguir un incendio mucho más rápido.