El rescate de la Guardia Civil fue posible gracias a la llamada de un hijo desde Estados Unidos, preocupado por la ausencia de su padre
Una llamada de alerta desde Estados Unidos ha sido la clave para que la Guardia Civil haya podido rescatar a un anciano de 81 años que se había caído en su casa. El hecho tuvo lugar el pasado 7 de octubre en Vecindario, cuando los agentes del Puesto Principal de la Guardia Civil en Vecindario recibieron una llamada de alerta por parte del hijo del anciano, quien reside en Estados Unidos y llevaba días sin saber de su padre.
Al desplazarse al lugar, los agentes recabaron la versión de un vecino, que se presentó como amigo de la familia. El vecino había acudido al domicilio como respuesta a la petición de la familia, para comprobar en qué estado estaba el anciano.
Tras llamar repetidamente a la puerta sin éxito, los agentes se dieron cuenta que desde la calle se observaba una ventana completamente abierta. Después de que uno de los guardias civiles escalase la fachada del edificio, observó al anciano caído en el suelo del salón, desnudo de cintura para abajo y semiinconsciente.
El anciano precisó de atención médica urgente
La actuación de la Guardia Civil ha sido crucial para salvar la vida del anciano. Accedieron al interior de la vivienda tras abrir la puerta desde dentro y facilitaron la entrada de los servicios sanitarios.
El anciano de 81 años tuvo que ser atendido sobre la marcha, mientras permanecía consciente y con signos de desorientación. Debido a la dificultad que presentaba para realizar algunos movimientos, fue trasladado con urgencia al centro de salud de Doctoral.


