Un amplio despliegue policial vigiló el lugar donde llegó también Francesco Arcuri, ambos con sus abogados

Juana Rivas ha entregado este viernes a su hijo menor, de 11 años, a su padre, el italiano Francesco Arcuri, que tiene su custodia, en cumplimiento de una orden judicial y tras un primer intento fallido que obligó a aplazar a este viernes el intercambio, que ya se ha formalizado, según han confirmado a fuentes judiciales.
Rivas llegaba este viernes, en coche privado y en compañía de su abogado, al lugar acordado para la entrega de su hijo menor al padre, el italiano Francesco Arcuri. Cumple así con lo decretado por el Juzgado de Primera Instancia 3 de Granada. Un juzgado que aplazó a este viernes el intercambio tras un primer intento fallido.
Ha sido poco después de las 9:00 horas cuando Rivas ha llegado en coche. Ha accedido directamente al garaje de los Juzgados de Caleta, donde se ha fijado la entrega. Eso ha evitado una exposición pública a diferencia de lo ocurrido el martes pasado. Ese día se produjo un enorme revuelo mediático y momentos de tensión en el punto de encuentro familiar en el que se fijó inicialmente el intercambio. Eso llevó a la juez a aplazarlo en condiciones de mayor privacidad y seguridad.
Amplio despliegue policial
Las medidas adoptadas por la juez no han evitado en cualquier caso la presencia de medios de comunicación en la zona, que esta vez sí ha sido acotada con un cordón de seguridad. Un amplio despliegue policial de agentes de la Policía Nacional vigila el lugar.
Media hora después ha llegado Arcuri, también en vehículo privado, en compañía de su letrado, siguiendo así las indicaciones de la juez. El juez estableció que los progenitores llegaran al lugar acompañados exclusivamente de sus abogados -a diferencia de lo ocurrido en el primer intento, en el que asesores y familiares acompañaron al menor-, con media hora de diferencia y en coche con acceso directo al garaje para evitar una sobreexposición.