Las tormentas caídas al paso de la depresión aislada en niveles altos (DANA) sobre España siguen dejando zonas inundadas, daños en viviendas, industrias y zonas agrarias, y cortes en servicios de electricidad y transporte. Las pérdidas millonarias ya se empiezan a evaluar
Este jueves, catorce comunidades autónomas se encuentran en aviso naranja -Aragón e Islas Baleares- o amarillo -Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Galicia, Comunidad de Madrid, Navarra, País Vasco, La Rioja y Comunidad Valenciana-, por lluvias y tormentas que está dejando la DANA a su paso por España desde el miércoles.
En Baleares, además, están en aviso amarillo por rissagas (resacas) u oscilación del nivel del mar en Menorca y Mallorca.
Varios gobiernos regionales y locales han puesto en marcha los planes elaborados para este tipo de emergencias ante la situación creada por las lluvias y tormentas.
Castilla-La Mancha es una de las comunidades más afectadas y, especialmente la provincia de Toledo, donde la Guardia Civil rescató a 37 personas, entre ellas dos ciudadanos franceses que quedaron atrapados en la localidad de Cobisa y una persona con discapacidad en Torrecilla de la Jara.
En la localidad de Guadamur, las lluvias torrenciales arrastraron coches e inmobiliario a su paso.
Las tormentas han dado un respiro en Cuenca, donde se han movilizado máquinas quitanieves para retirar el fango y el lodo de las carreteras en la zona de Barajas de Melo.
Vehículos atrapados en el agua en Valencia
Las lluvias torrenciales que han caído en las últimas horas en la Comunidad Valenciana han obligado a llevar a cabo durante la noche numerosos rescates de vehículos atrapados en el agua y achiques. Además, en el caso de ciudades como Valencia, ha causado daños en unas fallas que estaban en plena plantà.
Y es que la tormenta, que descargó con fuerza sobre el área metropolitana de Valencia y en la capital. Además estuvo acompañada de fuertes vientos, se produjo en plena plantà de los monumentos falleros -entre las 23 horas y la medianoche fue el episodio de más intensidad- y causó daños en algunos de ellos, como en el busto de la meditadora de la falla municipal, en la plaza del Ayuntamiento.
Entre las 11 de la mañana de ayer y las 7 horas de hoy, el teléfono único de emergencias 112 ha recibido 945 llamadas en la Comunidad Valenciana y ha gestionado 671 incidentes relacionados con el episodio de lluvias, la mayor parte por vehículos atrapados y garajes inundados.
Los bomberos del consorcio provincial de Valenciana han efectuado durante la noche numerosos rescates de vehículos atrapados en el agua y achiques en localidades como Pedralba, Torrent, Sagunto, Mislata, Riba-roja, Bétera y Manises -algunas de ellas también celebran estos días sus Fallas-, mientras que el consorcio provincial de Castellón ha retirado sobre todo árboles caídos.
El servicio de trenes está suspendido entre Vinaròs (Castellón) y Tarragona, si bien se ha restablecido la circulación en todas las carreteras valencianas y el fluido eléctrico en toda la red tras los cortes de anoche, mientras que la red de Metrovalencia funciona ya con normalidad.
Carretera anegadas por las tormentas
Mientras tanto, en Murcia, las calles de Lorca se encuentran anegadas .El Ayuntamiento ha pedido a los ciudadanos que eviten utilizar el coche mientras duran las tormentas, que mantienen anegadas la carretera a la altura de El Molino del Saltaor.
Como consecuencia de las precipitaciones ha salido toda el agua de las ramblas de la localidad que desembocan en el mar y la que presenta una situación más complicada es la de El Cañarete, que desemboca en la playa de Poniente.
También se ha producido una rotura en la tubería general de agua potable en la entrada al núcleo urbano, por lo que se prevé que puedan producirse cortes en el suministro a la población.
En Cataluña, donde ayer cayeron en tres horas 252 litros por metro cuadrado sobre Alcanar -más de la mitad de las precipitaciones de un año que son 490 l/m2- el Govern valora declarar zona catastrófica a los municipios afectados, según anunció esta mañana el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, tras una reunión con los alcaldes.
En la Comunidad de Madrid se ha vivido una noche más tranquila tras las tormentas de la anterior, que dejaron inundaciones en viviendas y líneas del Metro.