La investigación de un posible delito de revelación de secretos se debe, según el juzgado, a «las múltiples y continuas publicaciones» sobre la presunta trama de corrupción
El Juzgado de Instrucción numero 4 de Santa Cruz de Tenerife ha acordado, a instancia del abogado de Juan Bernardo Fuentes, abrir diligencias por un posible delito de revelación de secretos. Todo ante las «múltiples y continuas publicaciones» relativas a la presunta trama de corrupción conocida como «caso Mediador».
En este procedimiento, la magistrada María de los Ángeles Lorenzo-Cáceres investiga si un grupo presuntamente encabezado por dos cargos públicos (el exdiputado nacional Juan Bernardo Fuentes Curbelo y el exdirector general de Ganadería de Canarias Taishet Fuentes) y un general de la Guardia Civil (Francisco Espinosa) cobraba sobornos de empresarios para lograr contratos púbicos y subvenciones. O para impedir inspecciones o sanciones.
Bajo secreto de sumario hasta el 14 de febrero pasado
La causa se desarrolló bajo secreto de sumario hasta el 14 de febrero. Ese día fueron detenidos once de los doce investigados. En ese momento, Fuentes Curbelo todavía era diputado en el Congreso. La juez se abstuvo de tomar ninguna medida contra él, más allá de consignar en autos los indicios que lo señalaban.
El 13 de febrero, Lorenzo-Cáceres dictó un auto. Ordenó que, una vez practicadas las detenciones, se levantara el secreto de sumario y las diligencias fueran entregadas a todas las partes. Fue así ya que hasta ese momento solo las conocían el Ministerio Fiscal y los equipos de la Policía y la Guardia Civil al cargo del caso.
Sin embargo, según ha informado este martes el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, la magistrada cree ahora que «las múltiples y continuas publicaciones» relativas al «caso Mediador» podrían ser constitutivas de un delito de revelación de secretos. Ha abierto unas nuevas diligencias para determinar si es así.
Por el momento, aún no se ha hecho público el auto en el que explica las razones de esa decisión.