La Concejalía de Medio Ambiente ha comenzado los trabajos para inventariar las instalaciones y emplazamientos del municipio con la presencia de amianto
El Ayuntamiento de La Laguna, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, ha iniciado recientemente los trabajos de inventariado de las instalaciones y emplazamientos públicos y privados del municipio que cuentan con amianto, con el objetivo de elaborar un censo oficial de la presencia de este material.
Así lo indicó el concejal del Área, Domingo Galván, quien recordó que “el uso de este material está prohibido ante las consecuencias negativas que ocasiona en la salud de las personas, por lo que este inventario nos permitirá tener una visión clara de los lugares con presencia de amianto en el territorio municipal, identificarlos y catalogarlos según su nivel de riesgo”.
La empresa Gisgal, especializada en soluciones tecnológicas para la administración del territorio, se encargará de la realización de este censo preliminar. Para ello, utilizará un sistema de teledetección automatizada, a través del análisis de imágenes aéreas y satelitales, para la localización de las cubiertas con amianto.
Se valorará el riesgo para las construcciones del municipio
Además, realizará una valoración del riesgo para todas las construcciones del municipio y para todos los tipos de materiales con amianto, para lo que tendrá en cuenta la probabilidad de presencia de esos materiales, el posible riesgo para la salud y la cantidad de personas potencialmente expuestas.
Galván aclaró que “este censo no solo busca garantizar el cumplimiento de la normativa legal en materia de gestión de residuos peligrosos, sino también salvaguardar la salud de la ciudadanía y proteger el entorno natural”.
Un proceso en tres etapas
El edil también señaló que el primer paso se acaba de dar con la elaboración de este censo, y que con la información que se obtenga se dará un segundo paso, de inspección ‘in situ’ con técnicos expertos de los edificios y espacios de titularidad pública municipal.
De ahí se dará paso a una tercera etapa de trabajo, para acotar y clasificar los espacios que sean de titularidad pública, para luego empezar a planificar y valorar las acciones a realizar para la sustitución de este material de manera ordenada, segura y eficiente.