El Consejo de Ministros ha aprobado una nueva medida por la que los influencers y medios digitales deberán rectificar sus contenidos si son falsos o suponen un perjuicio
El Anteproyecto de Ley Orgánica Reguladora del Derecho de Rectificación amplía su aplicación a medios digitales e influencers. A partir de ahora, los creadores de contenido digital con más de 100 mil seguidores o más de 200 mil en varias redes sociales tendrán que rectificar de manera pública sus contenidos si son falsos o si suponen un perjuicio a los particulares.
Esta medida pretende facilitar el procedimiento y acabar con los bulos en las redes sociales. Asimismo, se trata de una normal que sustituirá a la de 1984, la cual solo se aplicaba a los medios de comunicación. Por tanto, tiene como objetivo adaptarse al «contexto actual de las nuevas tecnologías de la información».
De esta manera, con la modificación de la ley tanto medios como influencers tendrán diez días para hacer efectiva esa rectificación. «Es necesario garantizar que los derechos de cualquier ciudadano estén protegidos frente a injerencias, desinformaciones e informaciones retorcidas e inexactas», señaló el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, el pasado martes 17 de diciembre.
El anteproyecto refuerza los derechos de las personas con discapacidad y de las familias con fallecidos
Una de las innovaciones más importantes del anteproyecto es el ámbito de aplicación del derecho, que se extiende a los medios de comunicación social, incluyendo los digitales, y a los conocidos como influencers.
Además, la norma recoge que la rectificación «debe ser íntegra y hacerse con una relevancia semejante a la de la publicación original«. También incluye la obligación de incluir aviso de que la información ha sido rectificada en plataformas y medios digitales con la obligatoriedad de enlazar la rectificación y la información original.
En cuanto a las personas legitimadas para solicitar la rectificación, el anteproyecto refuerza los derechos de las personas con discapacidad y amplia los sujetos cuyos familiares hayan fallecido y les afecte una información. También amplía el plazo para solicitar la rectificación, pasando de los siete a diez días y manteniéndose la gratuidad absoluta de la difusión de la rectificación.