El IX Informe FOESSA, presentado en La Laguna, determina que algo más de 630.000 personas están en una situación de exclusión en Canarias
El IX Informe sobre Exclusión y Desarrollo Social en Canarias, presentado este jueves en La Laguna, determina que algo más de 630.000 personas están en una situación de exclusión, de las que sólo el 15 por ciento percibe el ingreso mínimo vital. Los obispos de Canarias y Tenerife, José Mazuelas y Bernardo Álvarez, han sido los encargados de presentar las conclusiones.
Daniel Rodríguez de Blas, técnico del Equipo de Estudios y de la Fundación FOESSA de Cáritas Española, subraya que la exclusión se ha ensanchado. A día de hoy, el 29,1% de los habitantes del Archipiélago, algo más de 630.000 personas, se encuentran en una situación de “desventaja importante”.
El informe, previsto para 2024, se ha adelantado con el objetivo de analizar el impacto de la covid-19 en la sociedad isleña.
Más de 300.000 personas viven en situación de exclusión severa en Canarias
Se registra también un aumento de un 15% de las situaciones de exclusión severa, llegando a más de 300.000 personas. Esto quiere decir que las personas en situaciones más críticas ya representan casi la mitad de las personas presentes en el espacio de la exclusión social.
Aunque en los últimos años se ha reducido la distancia con España, las tasas de pobreza siguen siendo en el Archipiélago superiores a las del conjunto del estado. En su versión más severa afectan a cerca de 425 mil canarios (19,6% en Canarias por 11,3% en España).
Las medidas de distanciamiento social para combatir la pandemia trajeron consigo una digitalización que se está revelando como un nuevo factor de exclusión. La brecha digital afecta al 30% de los hogares canarios y, en mayor medida, a los hogares en exclusión severa, pues un 44% de estos hogares no tienen acceso al mundo digital.
Feminización de la crisis
Según los datos recogidos en el informe, esta crisis está “feminizando” aún más el espacio de la exclusión. En 2021, el 28% de los hogares cuya persona sustentadora principal es una mujer se encuentra en situación de exclusión frente al 22% donde la figura sustentadora es un hombre.
La covid-19 ha impactado en la sociedad canaria como un «Titanic» que ha golpeado a las personas más vulnerables, que han cargado con las peores consecuencias. Especialmente en las familias con niños, mujeres, inmigrantes y jóvenes, ha detallado Daniel Rodríguez de Blas, técnico de la Fundación Foessa y coordinador del informe.
Una cuestión racial
La segunda brecha hace referencia al origen. Los datos concluyen que ser extranjero supone una enorme desventaja. Cerca de la mitad de los hogares encabezados por una persona de origen extranjero (47%) se encuentra en situación de exclusión. Esto significa casi el doble de exclusión que en los hogares encabezados por alguien de nacionalidad española, lo que dibuja una nueva línea de exclusión en esta “sociedad fracturada”.
Uno de cada tres jóvenes se encuentra en situación de exclusión
Estos son perfiles que la Fundación FOESSA lleva tiempo dibujando como colectivos desfavorecidos, pero en esta ocasión hay que sumar uno novedoso: ser joven.
Uno de cada tres jóvenes entre 19 y 29 años están afectados por procesos de exclusión social (33%), lo que les impide dibujar proyectos de vida para hacer la transición a la vida adulta.
Familias con hijos
Otro colectivo que acumula mayores factores de vulnerabilidad es el de las familias con hijos. La tasa de exclusión entre los hogares con niños, niñas o adolescentes es del 35% frente al 17% cuando sólo hay adultos. Por tanto, tener hijos o hijas está penalizado y las necesidades derivadas de la crianza lastran a las familias y a sus condiciones de vida.
Se ha producido un empeoramiento de las condiciones de trabajo, lo que genera más trabajadores pobres y niveles más bajos de realización personal y social.
Durante esta crisis, la precariedad se ha triplicado en Canarias. Casi 130.000 hogares (15%) dependen económicamente de una persona que sufre inestabilidad laboral grave.
En estos momentos, que el sustentador se encuentre en paro de larga duración es una realidad que alcanza a más de 50.000 familias. Además, el desempleo total familiar casi se ha duplicado, y hoy existen en Canarias más de 120.000 núcleos familiares donde todas las personas activas están en paro.
Salud y vivienda
Además del empleo, la vivienda y la salud son otros grandes motores de la exclusión en las Islas.
Más de 180 mil hogares (21%) han abandonado tratamientos médicos o han dejado de comprar medicinas por problemas económicos, una realidad que se dispara entre los hogares en situación de exclusión que afecta a más de la mitad (56%).
Pero es la salud mental una de las grandes revelaciones de esta crisis pues sufrir algún trastorno o enfermedad de salud mental, se ha multiplicado por cuatro y ahora alcanza al 19% de la población canaria (más de 400.000 personas).