Las lluvias caídas en los últimos días y las bajas temperaturas hacen aún más dura la vida de las personas acogidas en el campamento de Las Raíces, a la que se une la falta de comida para todos los que están acogidos en el campamento.
Los migrantes acogidos en el centro de Las Raíces, en Tenerife, siguen reclamando libertad para rehacer sus vidas en la Península o en otros países europeos, pero mientras permanecen en las islas exigen unas condiciones de vida dignas.
Las lluvias caídas en los últimos días y las bajas temperaturas hacen aún más dura la vida de las personas acogidas en el campamento de Las Raíces.
La comida es muy escasa y, según cuentan los migrantes, no alcanza para todos. Esta situación provoca que durante el reparto de alimentos hayan tenido lugar varias peleas entre usuarios.
Este martes ha vuelto a ocurrir a la hora del almuerzo, pero esta vez fuera del centro, donde cada vez eligen dormir más personas en tiendas de campaña, y donde reciben la ayuda de decenas de voluntarios
Protestas
El pasado sábado protestaron por si situación en un multitudinaria manifestación donde exigían libertad para poder seguir su viaje hacia la Península y Europa.
Además, protestas en forma de vigilia durante la noche de este martes. El objetivo es mostrar su rechazo a la deportación de un centenar de ciudadanos senegaleses previsto para este miércoles.
