Los vecinos han presentado alegaciones ante el peligro de su salud, pero la empresa responsable del hidrógeno asegura que la instalación no genera gases perjudiciales
Los vecinos de Cueva Bermeja, en Santa Cruz de Tenerife, muestran su enfado ante la posible instalación de una planta de hidrógeno renovable de 1.800 metros cuadrados cerca de sus casas.
Aseguran que el proyecto, al que se oponen 300 personas que han presentado alegaciones, supone un grave riesgo para su salud y nadie les informó del mismo.
Se trata de «alegaciones contra la salud, porque el expediente indica que la fábrica cuenta con un riesgo cinco, que es el más alto de todos debido a la posibilidad de que se produzcan fugas de gases», afirma el portavoz de Asociación de Vecinos de Cuava Bermeja-Anaga, Yeray Tosco.
Los vecinos, que ya contaban con una fábrica de cemento en el barrio, no están dispuestos a convivir con dos instalaciones industriales.
Muchas de las personas que viven en el barrio han fallecido de enfermedades aplicadas a la inhalación de estos humor. Esto dejaría de ser un barrio, sino una zona industrial», asegura el Portavoz de la Asociación.
Disa, empresa responsable del hidrógeno, asegura que la instalación no genera gases ni residuos perjudiciales para la salud. De momento se encuentran en una fase inicial y están dispuestos a facilitar toda la información necesaria a los vecinos.
El Ayuntamiento asegura que la empresa cumple con todos los requisitos y han pedido a la Autoridad Portuaria,que informe del proyecto a los vecinos . Reunión que se celebrará en los próximos días con todos los implicados.