Un hecho que se produjo horas después de desligarse en Bruselas del texto de conclusiones pactado por el resto de jefes de Estado y de Gobierno de la UE en relación a Ucrania

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, se ha desmarcado de nuevo este viernes de las posiciones de los otros 26 socios de la Unión Europea en relación al enfoque político sobre la guerra de Ucrania y a la potencial adhesión de este país al bloque comunitario, ya que entiende que la integración implicaría «el colapso de Europa».
Horas después de desligarse en Bruselas del texto de conclusiones pactado por el resto de jefes de Estado y de Gobierno de la UE en relación a Ucrania y que implicaba un nuevo espaldarazo al presidente Volodimir Zelenski, Orbán ha insistido en que Hungría se sitúa del lado de una coalición de países que apoyan la paz liderada por los Estados Unidos de Donald Trump.
Adhesión de Ucrania
«Siempre hemos dicho que debería haber paz porque la economía húngara no puede aguantar la guerra», ha dicho, en una entrevista radiofónica en la que ha puesto en duda la capacidad tanto de Ucrania como de la UE para soportar los costes económicos asociados al conflicto desatado hace más de tres años por la invasión rusa.

El primer ministro húngaro ha señalado que la UE no puede apoyar a las Fuerzas Armadas de Ucrania, la reconstrucción posterior del país y asumir sus propios retos en materia de Defensa. «Si seguimos por este camino, habremos gastado nuestro último céntimo en esta guerra«, ha apostillado.
Apertura del mercado
Orbán ha vaticinado que «al final» la UE se dará cuenta «que no puede aguantarlo», por lo que terminará sumándose a las tesis que viene defendiendo Hungría y que pasan también por cuestionar abiertamente las perspectivas de adhesión de Kiev.
En este sentido, ha criticado la apertura del mercado europeo a ciertos productos ucranianos y sus efectos en la economía local. Considera que la plena integración tendría efectos desastrosos, especialmente en el ámbito de la agricultura, según los extractos de la entrevista difundidos por el Gobierno.
Libre circulación
Orbán ha advertido además de posibles riesgos por la libre circulación de personas, ya que entiende que sería «irresponsable». «Ucrania tiene a 800.000 personas armadas y antes de la guerra ya era un país que no era conocido por su seguridad pública», ha agregado.