3.000 personas de toda Canarias que perciben el Ingreso Mínimo Vital y la PCI, con dificultades para hallar un empleo participarán en este proyecto pionero en Canarias
El proyecto Redlab, de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza, pretende facilitar el acceso al empleo de las personas que reciben la Prestación Canaria de Inserción o el Ingreso Mínimo Vital. Personas de entre 45 y 65 años con bajo nivel de estudios y sin conexión a internet. Difícilmente nos podemos mover por la red, buscar trabajo, socializar, si apenas tenemos un techo bajo el que dormir.
La idea es que se realice un ensayo con 3.000 personas con este perfil en Canarias. Está comprobado que la pobreza económica está vinculada directamente al fracaso educativo y la brecha digital.
Brecha digital y baja empleabilidad
La pandemia puso en evidencia la brecha existente y lo vulnerable que eran los que no podían acceder al equipamiento tecnológico, ordenadores, internet…algo que facilita también encontrar un trabajo. Esta es la razón de este proyecto que, de forma pionera, arranca ahora en Canarias.
Durante la presentación de la iniciativa en Puerto de la Cruz, en Tenerife, el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, afirmó que esta acción va en consonancia con «el compromiso que ha tenido este Gobierno para conseguir una mejora social en el archipiélago y que no haya diferencias de capacidades entre las familias».
Por su parte, la secretaria general de Objetivos y Políticas de Inclusión y Previsión Social, Milagros Paniagua, aseguró que «la inclusión en Canarias -donde 60.000 personas son beneficiarias del Ingreso Mínimo Vital- no se basa solo en el apoyo económico, sino en dar lugar a itinerarios que formen y preparen a los más vulnerables para el desarrollo de su vida».