En menos de tres semanas, tres millones de ucranianos se han convertido en refugiados. Algunos de ellos, recalan en Canarias
Familias ucranianas refugiadas inician una nueva vida en Canarias. En menos de tres semanas, tres millones de ucranianos se han convertido en refugiados. Alyona, Arseny y Sasha son tres de ellos. Tras realizar un viaje de más de 5.500 kilómetros han pasado su primera noche en Gran Canaria. En Canarias esperan iniciar una nueva vida gracias a la solidaridad de un policía nacional jubilado.
La primera vez que Maksim pisó suelo español tenía 9 años. Formaba parte de los denominados ‘niños de Chernóbil‘. Durante los noventa, muchos menores ucranianos eran acogidos por familias españolas. Julio, miembro de la asociación de jubilados de la Policía Nacional, ha intentado que Maksim regrese a casa.
Cuatro días en la carretera
Alyona, Arseny y Sasha, esta última de solo 8 años, son mujer e hijos de Maksim. El pasado domingo abandonaron su país. Un viaje de cuatro días por carretera y tras 1.100 kilómetros se reencontraron con Julio a 80 kilómetros de Budapest.
Gracias al apoyo de su mujer, poco a poco, se van aclimatando a un pueblo, el de Arguineguín, donde comenzarán a construir una nueva vida. Este jueves ha solicitado protección temporal como asiliados. Obtendrán todos los derechos asociados a esta figura. Entre ellos, la escolarización de los menores, permiso de residencia y trabajo.