El Rocasa Gran Canaria cayó derrotado este domingo en el partido de ida de las semifinales de la EHF European Cup ante Atticgo Elch
Gran trabajo sin premio para el Rocasa Gran Canaria. Las de Antonio Moreno realizaron un ejercicio de seriedad y concentración durante prácticamente todo partido. Les sirvió para plantar cara al mejor equipo de la Liga Guerreras Iberdrola esta temporada. Sin embargo, unos pocos minutos de desconexión fueron suficientes para condenar al equipo local.
Inicio complicado
El partido tuvo muchas alternativas en el marcador. Comenzó el encuentro con un 1-3 para el Elche que el Rocasa Gran Canaria supo estabilizar la contienda con un gol de Larissa pasados los diez minutos (3-3). Las ilicitanas buscaban ataques rápidos para pillar al Rocasa descolocado. Cuando lo conseguían, anotaban fácil. Pero las grancanarias comenzaron a replegar mejor y ya en estático, el caudal ofensivo visitante se redujo gracias a una defensa férrea y una Lulu Guerra en modo estelar.
El Elche, con una imparable Danila So Delgado, volvió a la carga. Así llegaron sus dos máximas rentas del partido, con tres goles de ventaja (4-7 y 7-10). Pero, a diferencia de otros partidos, el Rocasa no dio en ningún momento la sensación de estar fuera del partido. Muy al contrario, la remontada teldense se cocinó a fuego lento. Tardó en llegar pero, a tres segundos del final del primer tiempo, un gol de la brasileña Lopes, ponía el 12-11 para su equipo con el que se alcanzaba el entretiempo.
Las de Rocamora regresaron fuertes al partido y en apenas cinco minutos, le dieron la vuelta de nuevo al marcador, con una nueva distancia de dos tantos (15-13). Esta situación forzó un tiempo muerto solicitado por Antonio Moreno. La pausa surtió efecto deseado, ya que el Rocasa le volvió a dar la vuelta al choque y se puso, por primera vez en todo el partido, con dos goles arriba (20-18).
Paradójicamente, con la ventaja local, comenzaron los peores minutos del Rocasa. Especialmente en ataque, donde el equipo se encontró con un bloqueo que, a la postre, les condenaría en el encuentro. El Elche le metió otra marcha al partido para despegarse definitivamente.
A nueve minutos para el final, llegó un nuevo empate (22-22) para las visitantes. Fue el preludio de los tres minutos que marcaron el partido. El Atticgo Elche dió un puñetazo sobre la mesa y se colocó con un insalvable 22-25. El Rocasa, consciente de que habría un partido de vuelta, luchó hasta el pitido final y, aunque gozó de una última ocasión para haber dejado la renta en un solo gol, se tuvo que conformar con el definitivo 24-26