Los resultados ofrecen dos posibles escenarios de pacto: o un Govern de signo independentista -con o sin carteras en manos de la CUP- o una coalición de izquierdas: ambas opciones tienen a ERC como denominador común.
El PSC y ERC empatan a 33 diputados en las elecciones al Parlamento catalán del 14F, seguidos a corta distancia por Junts, que obtiene 32 escaños, con el 92,48 % de los sufragios escrutados.
Los socialistas se sitúan en primer lugar en porcentaje de votos -23,12 %-, mientras que los republicanos quedan segundos, con el 21,36 % de los sufragios, seguidos de JxCat, con el 19,96 %.
En cuarto lugar se mantiene Vox, con 11 diputados, seguido de la CUP, con 9; En Comú-Podem, con 8; Ciudadanos se desploma hasta los 6 representantes; y el PP baja a 3, mientras que el PDeCAT se quedaría sin representación parlamentaria.
En las elecciones anteriores, las celebradas en diciembre de 2017, Ciudadanos obtuvo 36 escaños; Junts sumó 34; ERC tuvo 32 representantes, el PSC logró 17 diputados; los comunes, 8 y la CUP y el PP cuatro cada uno.
Los resultados del 14F en Cataluña ofrecen dos posibles escenarios de pacto: o un Govern de signo independentista -con o sin carteras en manos de la CUP- o una coalición de izquierdas: ambas opciones tienen a ERC como denominador común, por lo que deberá elegir aliados.
El independentismo ha revalidado una vez más su mayoría absoluta, pero las relaciones entre ERC, JxCat y la CUP no pasan por su mejor momento y no será sencillo alcanzar un acuerdo, por lo que si esta opción falla se abrirá una posibilidad para explorar una coalición alternativa de izquierdas, también de difícil articulación.
