Los de Lakovik se mantienen en el liderazgo en la Eurocup tras vencer al Mincidelice JL Bourg en Bresse
El Dreamland Gran Canaria se mantiene invicto en la Eurocup pese a los resultados negativos de la ACB. Así, continúa liderando en solitario el Grupo B tras superar al Mincidelice JL Bourg en Bresse, rival con el que se jugaba el primer puesto en la cuarta jornada de la competición continental (84-76).
El pívot tejano Ben Lammers se convirtió en el principal baluarte de los claretianos en este duelo con sus 17 puntos y 7 rebotes, junto con los 12 puntos, 6 rebotes y 21 de valoración del francés Pierre Pelos, haciendo estériles los 13 de Jeremy Morgan y los 11 puntos y 5 rebotes de Zaccharie Risacher, en las filas visitantes.
El conjunto galo tomó las riendas del encuentro en los primeros compases (6-9) aprovechando el aporte físico de Kokila en la pintura y la polivalencia de Risacher, hijo del conocido internacional francés campeón ACB con el Unicaja, Stephane Risacher.
No obstante, el estadounidense Ethan Happ asumió el protagonismo en el ataque amarillo (6 puntos en el primer cuarto), tomando el testigo tanto su compatriota Lammers como el argentino Nico Brussino para equilibrar la balanza (15-15) en el ecuador del periodo inicial.
Con esa panorámica, siguió creciendo el juego de Lammers, comandando el tejano la batería ofensiva de los isleños con 11 puntos. Con eso bastó para cerrar el primer cuarto en favor de los claretianos (26-21).
Los de Fauthoux se resisten
En el segundo parcial, el Dreamland estiró el chicle con Bassas y Pelos, superando la decena de diferencia (39-28) a seis minutos para el descanso.
El entrenador amarillo, Jaka Lakovic, continuó apurando las rotaciones para desgastar aún más la trinchera francesa, desactivando la reacción de Salash y Brown en ataque e incrementando la renta hasta los 18 puntos (56-38), tras dos lanzamientos desde la línea de personal de Brussino. Sin embargo, un triple final de Risacher permitió al Mincidelice edulcorar ligeramente la desventaja al descanso (56-41).
A la vuelta de vestuarios, Pelos tomó el relevo de Lammers para aumentar la herida hasta los 23 puntos (69-46), forzando el tiempo muerto del entrenador visitante, Frederic Fauthoux. A partir de ahí, Rowland y Morgan maquillaron ligeramente la hemorragia, dejando la desventaja en 13 (69-56), a falta de diez minutos para la conclusión.
Los pupilos de Lakovic terminaron frenando la efervescencia gala. Salvó, Albicy y Shurna engordaron sus estadísticas en un choque que se mantenía sobre la quincena (75-60) a seis minutos para el desenlace. Morga y Kokila se animaron al intercambio de canastas y ese caos en ambos aros acabó por forzar una pausa táctica de manos de Lakovic (78-67).
Lammers y Albicy volvieron a saltar al parqué para amarrar una ventaja que se antojaba plácida, pero que al final se complicó con ese arrebato anotador del Mincidelice que terminó ajustando el resultado (84-76).