La relevación del torneo, Finlandia, y la actual campeona del mundo, Alemania, buscarán un ticket a la final
La selección finlandesa, encabezada por el ala-pívot Lauri Markkanen, y la alemana, vigente campeona del mundo, se enfrentarán este viernes a las 15:00 horas en la primera semifinal del Eurobasket tras imponerse respectivamente a Georgia (93-69) y a Eslovenia (99-91).

En el caso de Finlandia, después de eliminar a Serbia en octavos, competía por el título honorífico de equipo revelación contra Georgia, que fue capaz de derribar a Francia. Un duelo inesperado a estas alturas de la competición que estuvo igualado hasta el tramo final del primer cuarto.
Por su parte, Alemania fue capaz de imponer su poderío colectivo sobre las heroicidades individuales de Luka Doncic, que volvió a colgarse a Eslovenia sobre sus espaldas anotando 39 puntos, capturando 10 rebotes y repartiendo 7 asistencias para 36 dígitos de valoración.
La favorita y la revelación
Alemania parte como la principal favorita del torneo tras llegar al Eurobasket con el peso de ser la vigente campeona del mundo. Su juego ofensivo y dinámico, con jugadores de nivel NBA como Franz Wagner, Dennis Schröder o Tristan Da Silva, se enfrenta a la revelación del torneo.
Por su parte, la selección finlandesa se ha posicionado como la gran sorpresa del mayor torneo europeo, con su estrella Lauri Markkanen, jugador de los Utah Jazz, y el joven Miikka Muurinen, que está llamado a ser un top 5 del draft NBA en 2027.
A estos se les suman jugadores de nivel como Sasu Salin, exjugador del Dreamland Gran Canaria y el CB Tenerife, que intentarán seguir sorprendiendo y alcanzar la final.

A pesar del buen juego demostrado por la selección escandinava, la selección alemana sigue sin perder durante el torneo y no ha dado ningún ápice de duda de mantener el buen juego demostrado en los últimos torneos internacionales.
Durante la fase de grupos, ambos conjuntos se enfrentaron con una victoria arrolladora del equipo germano (61-91), un partido que puede servir de precedente aunque ninguna de las dos selecciones llegaba al encuentro con presión.