El desmantelamiento de la refinería de Santa Cruz de Tenerife es progresivo y se espera que para 2028 desaparezca del todo para dar paso a una nueva ciudad
La refinería de Santa Cruz de Tenerife se construyó en 1930 y ahora se encuentra inmersa en un proceso de desmantelamiento que durará varios años, aunque ya se manejan fechas decisivas para el futuro proyecto que albergará esta zona de la capital tinerfeña.
De momento ya se han desmantelado las tres grandes chimeneas y una de las unidades de producción, los primeros pasos de la transformación energética. No existe ahora mismo en Europa ningún proyecto similar de esta magnitud para desmantelar una industria.
El desmantelamiento va a ser progresivo. Todavía no se nota demasiado, pero la intención es que Cepsa no desaparezca, sino que se traslade y, sobre todo, que cambie su actividad.
Se van a invertir unos 400 millones de euros en biocombustible y en generar un futuro para la isla mucho más sostenible. El objetivo es que en el año 2028 desaparezca del todo esta refinería del espacio de la capital tinerfeña y se empiece dos años después, en 2030 el diseño de la que será la nueva ciudad, una Santa Cruz Verde.