El reconocimiento jurídico como archipiélago permitiría delimitar las aguas canarias y defender sus intereses frente a terceros países
El Parlamento de Canarias ha aprobado este miércoles una proposición no de ley instando al Gobierno de España a intensificar las gestiones ante la ONU para lograr el reconocimiento jurídico internacional de Canarias como archipiélago, con arreglo al artículo 46.b del Tratado Internacional del Mar.
La iniciativa, impulsada por Nueva Canarias (NC) y apoyada por todos los grupos parlamentarios excepto Vox, busca «defender el estatus que ya tiene reconocida Canarias en el Estatuto de Autonomía como archipiélago», según explicó el diputado de NC Luis Campos.
El objetivo final es obtener el reconocimiento internacional de la condición de archipiélago para Canarias, lo que permitiría delimitar las aguas canarias y defender sus intereses frente a terceros países, especialmente Marruecos.
Una reivindicación histórica
La reivindicación del archipiélago canario como un «archipiélago de pleno derecho» no es nueva. Se ha planteado en multitud de ocasiones a través de distintas iniciativas aprobadas por ayuntamientos y cabildos insulares.
Campos argumenta que la consideración de archipiélago tiene «claras connotaciones jurídicas» que deben ser reconocidas en el derecho internacional público, ya que la indefinición de las aguas canarias pone en riesgo «numerosos aspectos esenciales para Canarias».
Amenaza a las aguas canarias
El diputado de NC advirtió de la «estrategia de hechos consumados» de Marruecos, que en 2020 aprobó dos leyes que no limitan las aguas de explotación exclusiva del país magrebí, anexionándose no sólo las aguas del Sáhara Occidental, sino también aguas canarias.
Estas leyes, aunque no tienen validez en el ámbito del derecho internacional, según Campos, «responden a la estrategia de hechos consumados propias de un país que por la misma vía lleva ocupando ilegalmente el Sáhara Occidental desde el año 1975».
A esto se suman las perforaciones petrolíferas llevadas a cabo por Marruecos frente a las costas canarias y los recientes descubrimientos de recursos minerales en aguas atlánticas cercanas al archipiélago.
Una cuestión de interés económico, geopolítico y medioambiental
Por todo ello, Campos insistió en que la delimitación internacional de las aguas canarias es de vital importancia desde el punto de vista económico, geopolítico y medioambiental.
«Las investigaciones y extracciones que se realizaran podrían poner en riesgo a la población, ecosistemas de biodiversidad marina y a sectores económicos canarios, como la pesca o el turismo», afirmó.
Vox se abstiene
Javier Nieto, diputado de Vox, fue el único representante que no apoyó la proposición no de ley. Criticó que se les haya excluido del debate previo y señaló que la solución para Canarias «no es una patada a la Constitución española» ni «puentear al Estado español».
Sin embargo, admitió que el análisis que plantea la proposición no de ley tiene «mucha razón» respecto a la «dejadez» del Gobierno central «que ha abandonado a Canarias, lo que Marruecos ha aprovechado».