Se valían de la colaboración de un laboratorio, ubicado en la provincia de Granada, donde mezclaban el producto con los excipientes necesarios que lo hacían apto para su consumo
Desarticulada una banda dedicada a importar, fabricar y distribuir anabolizantes. La Guardia Civil y la Policía Nacional, en una operación conjunta denominada Kapli-Sansón, han desarticulado una organización criminal dedicada a la importación, fabricación y distribución a gran escala de anabolizantes, que incluía a Canarias. Según informó este sábado el Ministerio del Interior.
Los SARMS (Moduladores Selectivos de los Receptores de Andrógenos) son medicamentos con efectos anabolizantes que los investigados importaban en polvo –desde terceros países- para, posteriormente, elaborarlos y distribuirlos en estado líquido en el interior de envases de formato gotero.
Para ello, se valían de la colaboración de un laboratorio, ubicado en la provincia de Granada, donde mezclaban el producto con los excipientes necesarios que lo hacían apto para su consumo.
El producto era ofertado a través de una página web y de redes sociales, donde diferentes perfiles de entrenadores personales y fisicoculturistas los promocionaban de forma activa para mejorar las capacidades físicas o deportivas.
Los agentes han detenido a cinco personas (hay otras cinco investigadas) y han realizado seis registros fruto de los cuales han incautado 10.000 goteros con SARMS listos para su distribución, así como numeroso material utilizado para su fabricación, acondicionamiento y envío, y 30.000 euros en efectivo.
En concreto, los registros se han hecho en las provincias de Castellón, en una empresa logística de Madrid y en un laboratorio de Granada.
Desarticulada una banda
De los registros realizados en Castellón, hay que destacar el de un gimnasio donde los agentes localizaron una gran cantidad de SARMS ya preparados para su venta y distribución, así como viales, botes y jeringuillas de otros medicamentos anabolizantes esteroides.
La investigación se inició el pasado año cuando los investigadores tuvieron conocimiento de la existencia de una organización criminal presuntamente dedicada a la importación, fabricación y distribución de medicamentos denominados Moduladores Selectivos de los Receptores de Andrógenos (SARMS) cuya distribución se encuentra prohibida en España.
En el laboratorio granadino se llevaba a cabo la primera fase de acondicionamiento de los medicamentos: el envasado en frascos gotero, la colocación de la correspondiente etiqueta y su introducción en las cajas con el formato diseñado por el cliente.
Una vez preparados los goteros, los investigados los enviaban a empresas de logística donde se encargaban de la preparación final de los paquetes para su envío a los receptores ubicados en la península, las Islas Canarias y distintos países de la Unión Europea.