El 52% de la población se autodiagnostica de enfermedades en internet, en mayor medida mujeres (55%) que hombres (48,4%)
Por comunidades, los canarios (66,4%), extremeños (64,2%) y gallegos (61,6%) copan los primeros puestos en la consulta de información sobre enfermedades en la red.
Así se desprende del VI Estudio de Salud y Vida elaborado por la aseguradora AEGON sobre la evolución de las tendencias de estilo de vida y salud. Se analiza el rol adquirido por las nuevas tecnologías en este campo. Según el estudio, ha aumentado en 8,5 puntos el porcentaje de quienes buscan síntomas en internet en lugar de consultar y buscar el asesoramiento de un profesional de la salud, respecto a 2022 (43,5 %).
Los jóvenes, los más asiduos
Un 70,6 % de los jóvenes de entre 18 y 25 años buscan información sobre dolencias en internet, mientras que solo lo hace el 33,3 % de los mayores de 65 años.
Además, las personas que trabajan (57,6 %) y que no tienen hijos (57,1%), buscan en mayor medida síntomas en internet. Hay mayor predisposición por el autodiagnóstico entre quienes se automedican (66,1 %) y los que usan aplicaciones de salud y bienestar (65,8 %).
Síntomas ocasionales como dolor de cabeza, de espalda o de estómago son las búsquedas más frecuentes (54,6 %), seguidas de enfermedades leves o puntuales, como catarros, conjuntivitis, candidiasis, herpes (48,8 %).
Crecen las consultas por salud mental
En los resultados aumentan los que se interesan por síntomas psicológicos, con un 34,3%, frente al 19,7% de 2022. Por otro lado descienden quienes aseguran no tener ningún síntoma psicológico (del 20,2% al 12,2%). Las mujeres vuelven a ser quienes más se informan sobre trastornos mentales (33,6% frente al 30,1%).
Por edades, los mayores de 65 años representan el 18,1%. En este grupo, un 31,5% manifiesta no tener síntomas. Por contra quienes están entre los 26 y los 40 años son los que menos relatan no tener estos síntomas (6,9%) y un 46% reconoce buscar frecuentemente las causas.
«Entender que les pasa» lleva a un 56,7% de personas a realizar búsquedas, frente al 83,6% de 2022. El segundo motivo es pensar que «uno mismo puede solucionarse los problemas psicológicos» (25,6%) y, en tercer lugar, por motivos económicos y por no poder pagar a un profesional de la salud mental (21,5%).