Rusia confirmaba este viernes que han «rescatado» 177 civiles y capturados 1.908 soldados
El Batallón de Azov, una organización paramilitar que combate en apoyo a las Fuerzas Armadas de Ucrania, ha ordenado «dejar de defender» la ciudad de Mariúpol. Esto implica la entrega de la acería de Azovstal, símbolo de la resistencia final de la zona.
El comandante Denos Prokopenko ha confirmado en un vídeo la rendición en dichas instalaciones. Alegan que se trata de una decisión necesaria para proteger la vida de los combatientes que aún siguen en la zona.
El ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, ha afirmado este viernes que sus tropas han «rescatado» a 177 civiles y capturado a 1.908 «nacionalistas» que «han depuesto sus armas», según la agencia de noticias TASS.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) pidió el jueves un acceso «inmediato» a estos prisioneros, de los que intenta también recabar datos. Las autoridades ucranianas, por su parte, mantienen su interés de hacer un futuro canje de prisioneros con los militares que hayan sido capturados tras abandonar la acería.