El decreto aprobado consolida el modelo de gestión insular y refuerza la conservación del espacio natural protegido más visitado de España
El Consejo de Gobierno de Canarias aprobó este martes el decreto que transfiere al Cabildo de Tenerife la gestión y conservación del Parque Nacional del Teide. La medida formaliza de manera definitiva el traspaso de funciones desde la Administración autonómica. La decisión refuerza el modelo de gestión insular, apostando por una administración más cercana y eficaz. El objetivo prioritario se orienta a garantizar la conservación de un enclave natural estratégico.
La aprobación del decreto culmina un proceso administrativo y normativo iniciado años atrás. El Cabildo de Tenerife ya ejercía estas competencias mediante un sistema de delegación, pero el nuevo marco jurídico unifica y consolida las funciones transferidas. El texto regula recursos humanos, materiales, patrimoniales y económicos asociados a la gestión.
Instalaciones y recursos al servicio del parque
El decreto establece que el Cabildo contará con los bienes y derechos necesarios para desarrollar sus funciones con anexos que detallan con precisión los recursos adscritos a la transferencia. Entre los inmuebles incluidos destaca el Centro Administrativo y de Visitantes Telesforo Bravo. La cesión abarca dependencias administrativas, espacios expositivos y el salón de actos.
La transferencia se ajusta a la Ley 5/2024 de Presupuestos Generales de Canarias para 2025. La norma fija que desde el 1 de enero de 2025 la gestión corresponde al Cabildo de Tenerife. El Gobierno de Canarias mantiene la formulación y aprobación del Plan Rector de Uso y Gestión y también conserva la interlocución con la UNESCO para preservar el estatus de Patrimonio de la Humanidad.


