El jugador del Unión Isora tuvo que ser hospitalizado después de la agresión que sufrió por parte de un grupo de aficionados en el campo del Ibarra, en el sur de Tenerife.
El joven jugador juvenil del Unión Isora, que el pasado sábado tuvo que ser hospitalizado tras sufrir una brutal agresión por parte de un grupo de aficionados en el campo del Ibarra, se encuentra estable y este martes tendrá que pasar por el quirófano para operarse de una doble fractura de mandíbula.
Una agresión que ha condenado el Unión Isora en un comunicado, a través de las redes sociales, en el que pide que se investigue y se castigue este tipo de actos para que no se vuelvan a producir.
Por su parte, el UD Ibarra, también en un comunicado, anunció que ya ha tomado medidas, el club ha destituido a su delegado de campo y ha apartado de la competición al Juvenil B para lo que resta de temporada.