Contundente triunfo del conjunto insular en el Pabellón Príncipe Felipe, que jugó con intensidad y mantiene su buena racha hasta el comienzo de las eliminatorias por el título
El Lenovo Tenerife, con su triunfo a domicilio sobre el Casademont Zaragoza (60-91), demostró que no se relaja. Aunque tenga en el bolsillo la tercera plaza, quiere mantener su buena dinámica hasta el comienzo de las eliminatorias por el título.
El conjunto insular consiguió una contundente victoria en el pabellón Príncipe Felipe de la capital aragonesa. Victoria que cortó la buena racha que acumulaba el equipo aragonés. Sumaba cuatro victorias en los cinco últimos encuentros.
El Lenovo Tenerife comenzó dubitativo, fue creciendo a lo largo del encuentro y superando a un rival que se hizo más pequeño ante la excelente defensa de su oponente.
De hecho, los propietarios de terreno se quedaron en 60 puntos, la anotación más baja de toda la temporada, cuando su media era de 87.
El conjunto aragonés inició el encuentro sujetando bien en ataque a su rival, que tuvo muchos problemas para anota. Cuando lo hizo fue con un porcentaje bajo de acierto.
Esto permitió al Casademont, que fue capaz además de dominar su rebote defensivo, correr y anotar con cierta facilidad hasta llevar su ventaja a los 8 puntos de renta máxima (22-14) en el último minuto del primer parcial. Llegó hasta los diez (27-17) al comienzo del segundo.
Intensidad y mejoría defensiva
Sin embargo, la mejoría defensiva del equipo canario fue tomando forma y al conjunto «rojillo» se le hizo cada vez más complicado mover el balón en ataque posicional y anotar.
La intensidad del Lenovo Tenerife provocaba errores y pérdidas de balón en el equipo maño (hasta seis en este cuarto). Se empecinó en resolver el problema de manera individual en vez de colectivamente, a la vez que aumentó el acierto en los lanzamientos del equipo tinerfeño.
Esto, unido a que en el equipo insular todos aportaban en ataque. Hizo que el marcador fuera poco a poco variando hasta darle la vuelta y llevando el rédito hasta los 8 puntos (32-40) en el minuto 18.
Los once puntos que anotó el Casademont Zaragoza en el tercer parcial dejaron bien claro que la dinámica del partido había cambiado. Esa tendencia continuó hasta el final porque a los locales les entraron las prisas y la desesperación por querer arreglar la situación, lo que facilitó el despegue de un Lenovo Tenerife que no se relajó y que acabó venciendo por 31 puntos.